La cordialidad como aliado parlamentario con el Gobierno no la conciben en ERC. Los independentistas son diestros en tensar las negociaciones con el Ejecutivo de coalición hasta el último momento, como hicieron con la ley Audiovisual y el catalán, y todavía con esas se permiten licencias a la hora de criticar a los demás grupos.
Ayer el portavoz en el Congreso del Grupo Republicano, Gabriel Rufián, cargó directamente contra sus homólogos socialistas acusándoles de ser los culpables del retraso en la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado de 2022. «Ha sido un desastre», soltó, minutos antes de participar en la última sesión de control del año. Sin dar nombres, aunque ni falta que hizo.
Estaba previsto que la ley de Presupuestos se hubiera aprobado definitivamente el martes después de su votación en el Senado, sin embargo, una enmienda presentada por Compromís sobre la promoción de las lenguas regionales y minoritarias, que el Partido Popular avaló, truncó esos plazos.
Según recogió ayer Ep, el portavoz de ERC considera que los populares y Vox están «haciendo el troll» para «torpedear» las negociaciones del Gobierno con sus socios ('trollear' es un modismo utilizado en internet para referirse a algo que genera polémica y molesta). Y lo sostiene así porque dice que no entiende que los populares digan por un lado que el castellano está «perseguido» en Cataluña y por otro apoyen una enmienda en favor de las lenguas cooficiales en la Cámara Alta.
Las cuentas han sido remitidas nuevamente al Congreso de los Diputados porque así lo refleja el reglamento de la Cámara cuando el Senado introduce una enmienda nueva. Según anunció la Mesa del Congreso ayer, el pleno en el que se debatirá y votará la enmienda de Compromís será el próximo martes. Por lo que el 1 de enero entrarán en vigor, como quería el Gobierno, y solo se retrasa siete días la tramitación definitiva tras el imprevisto. Además de los senadores del PP, dicha enmienda también fue apoyada por ERC, Junts, PNV y el grupo proponente.
De Lastra a Gil
«Nosotros ya avisamos que esto podía pasar, que el Partido Popular y Vox harán todo lo posible para torpedear las negociaciones del Gobierno y socios», expresó Rufián. Sin embargo, no solo cargó contra la oposición, sino que cuestionó el trabajo y la relación parlamentaria con los socialistas. Concretamente, hizo referencia al relevo de portavoces y el descontrol que supuso. «El año pasado ya pasó y se controló bien, pero este año el PSOE cambió de portavoces y ha sido un desastre», valoró.
Se refiere a la exportavoz socialista en el Congreso Adriana Lastra, a la sazón vicesecretaria del PSOE, con la que negoció no solo parte de los medidas de la primera mitad de la legislatura sino también la investidura de Sánchez, y al exportavoz en el Senado, Ander Gil, que ahora es presidente de la Cámara Alta. Ambos fueron sustituidos en otoño por el diputado canario Héctor Gómez y la catalana Eva Granados. Considera que el PSOE ya debería saber cómo actúa el líder de la oposición y haber prevenido la maniobra para retrasar la aprobación de los Presupuestos. Críticas a Gobierno y derecha con las que curiosamente el portavoz de ERC parece pasar por alto que fue su partido el que ha estado condicionando desde hace semanas la negociación de las cuentas públicas al supeditar el apoyo a aprobar medidas extrapresupuestarias.
Concretamente, ERC condicionó toda la votación a «blindar» el catalán en la futura ley audiovisual. Gobierno y ERC llegaron a un acuerdo hace justo una semana para usar dinero público en incentivar el doblaje en lenguas cooficiales. Y ERC retiró entonces las enmiendas parciales a las cuentas que habían registrado como presión.
