La Reina española conoce muy bien el significado que encierra la elección de sus atuendos. En su visita oficial a Suecia junto a Don Felipe está dejando claro, una vez más, que sigue siendo un ícono de estilo y que atiende a las tendencias, pero también que sabe dónde está, y por eso en la cena de gala que ofrecieron esta noche los reyes Carlos Gustavo y Silvia ha elegido un look cargado de significado.
Se trata de un modelo de noche de la firma 'low cost' H&M, que ya había llevado en otra ocasión la princesa Victoria de Suecia. Es un vestido de tul azul noche, con falda acampanada y transparencias, y, lo que es mejor, de la línea sostenible de la marca sueca, H&M Conscious. Así, está fabricado con poliéster reciclado teñido y cuesta 300 euros.
Mientras Doña Letizia lo llevó sin mangas, Victoria le había hecho el añadido de unas tres cuartos transparentes. La soberana de España acompañó el vestido con la soberbia tiara Flor de Lis, la más importante del joyero de los Borbón. Tambien lució pendientes de brillantes, brazaletes de Cartier, su inseparable anillo dorado de Karen Hallam y un broche de la misma flor sujetando la banda.
Letizia, de H&M en Suecia.
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Gtres
Para el exterior escogió un abrigo de pelo negro y enseñó un sobre dorado de Magrit.
Letizia dio la nota con este simbólico vestido para la cena de gala en Suecia después de sorprender, durante el día, con uno de sus looks más llamativos tras un largo período mucho más discreto a raíz de la pandemia y el confinamiento: un conjunto en rojo y nude con turbante que dará que hablar este invierno.
