La judicatura española teme que la acción política del Gobierno deje en papel mojado, y anule de hecho, las sentencias relacionadas con el proceso independentista. Las declaraciones del presidente Sánchez en favor de los indultos a los condenados porque «la venganza no es un valor constitucional», o las de quien fuera su vicepresidente, Pablo Iglesias, asegurando que «hay que ir hacia el diálogo, hacia la normalización y la convivencia que se fundamenta en la libre confrontación de ideas», dando cobertura al argumento de Carles Puigd emont, y de los demás huidos y condenados, de que el Tribunal Supremo persigue a la libertad de expresión y una determinada manera de pensar, tendrán un fuerte impacto en los jueces del Tribunal Europeo... Ver Más