El juicio contra 12 colaboradores y trabajadores de Mediaset -incluido el presidente Alejandro Echevarría- celebrado este miércoles por una demanda interpuesta por la familia Franco a raíz de la emisión de un programa sobre la herencia del dictador quedó visto para sentencia. La Fiscalía ha descartado cualquier tipo de intromisión al honor de los colaboradores a los nietos del dictador.
A las doce de la mañana fueron citados todos los comparecientes para mostrar cómo realizaron las investigaciones periodísticas que luego se emitieron en el programa: ‘En el Punto de mira’. Fue en el canal Cuatro en julio de 2018 y el episodio, que se llamó ‘La herencia de los Franco’, abordó las diferentes propiedades que el dictador había dejado a su familia como El Pazo de Meirás, el Palacio del Canto del Pico, el Palacio de Cornide o La Finca de Valdelafuentes.
Como testigo de los Franco compareció el presidente de la Fundación Francisco Franco, que no negó la autenticidad de los documentos manejados por el programa de televisión de donde salieron muchos de los datos difundidos. Los periodistas investigados mostraron archivos de la Memoria Histórica de Salamanca, Archivos del Palacio de Oriente y Archivos de la Fundación Francisco Franco.
Para la Fiscalía quedó acreditado que los demandados actuaron con el deber de diligencia en la comprobación de las fuentes y la veracidad de las informaciones difundidas por Mediaset en el programa.
Los nietos del dictador que firman la demanda señalan a los dos directores del programa, tres reporteros, así como los periodistas de investigación Mariano Sánchez Soler y Jorge Otero Bada; el exconsejal de Sada Carlos Babío y el colaborador Jimmy Giménez Arnau, a quien la justicia declaró en “situación de rebeldía” por no presentar ningún abogado. Argumentaron que el contenido del programa era “difamatorio y de desprestigio” y que “no se ajustaba a la verdad”. El juicio quedó visto para sentencia.
