Como un inminente peligro y un claro escocido, es como activistas de al menos 15 agrupaciones ambientalistas clasificaron a la construcción del viaducto que se está realizando sobre el río Santa Catarina.
Dentro de los actores que alzaron la voz se encuentran el Comité Ecológico Interescolar, Colectivo Nosotros, Natusalud, Tierra Prima, Abeja y Planta, Asociación Pro Conservación del Río Santa Catarina, Movimiento Ecologista Mexicano , Sociedad Sostenible y Pueblo Bicicletero, por mencionar algunos.
Al respecto Liliana Flores Benavides, del Colectivo Nosotros, denunció que tras esta obra hay una gran omisión de parte de las autoridades, ya que, precisó, no se cuentan con los permisos necesarios para desarrollar el proyecto.
“Se ha buscado información pública sobre la obra y no la encontramos”, mencionó la activista.
Por su parte, María Enríquez, del Comité Ecológico Interescolar, manifestó que estas acciones más que abonar a la movilidad están dañando al medio ambiente.
“Es un atentado al medio ambiente. La salud de las personas se va a agravar con los polvos que emanen durante 2 años y medio, lo que puede durar la obra”, destacó Enríquez.
Asimismo, acusaron que la instalación de 250 columnas, al interior y al margen del afluente, acentúa la crisis de movilidad y de la calidad del aire, y sobre todo, pone en riesgo la coexistencia de 648 especies biológicas nativas del lugar.
Ante la falta de información y ante los daños que se han presentado en la calidad del aire de la zona, los presentes anunciaron que acudirán a la Profepa e incluso a tribunales federales para interponer juicios de amparo con el objetivo de detener la construcción del viaducto.
Con el viaducto se contempla ampliar la autopista de cuota Monterrey-Saltillo, para conectarla con la avenida Díaz Ordaz y el bulevar Antonio L. Rodríguez, en su primera fase.