El herbicida de la compañía Monsanto que le ha supuesto a la alemana Bayer -su dueña desde el mes de junio- perder más de 10.000 millones de euros en bolsa en un solo día es un producto que conocen bien los agricultores españoles. De hecho, desde hace años este herbicida, el glifosato, es el más utilizado en los campos y cultivos de nuestro país para eliminar las malas hierbas. Tanta importancia tiene esta sustancia en la agricultura española que un reciente estudio de la consultora PwC -de abril de 2017- estimó que dejar de usar este herbicida en nuestro país tendría un impacto económico de más de 2.000 millones de euros al año y vería comprometido el empleo de cerca de 5.000 trabajadores en España.