Microsoft renunció a su asiento en la junta de Open IA y dijo que su participación ya no es necesaria porque la compañía de ChatGPT ha mejorado su gobernanza desde que sufrió unos días de caos en la junta directiva el año pasado.
En una carta el martes, Microsoft confirmó que renunciaría “con efecto inmediato” a su puesto de observador en la junta de la firma de inteligencia artificial.
“Agradecemos el apoyo mostrado por la dirección de OpenAI y la junta de OpenAI al tomar esta decisión”, dijo la carta.
La inesperada salida se produjo en medio de un creciente escrutinio de los reguladores antimonopolio sobre la poderosa alianza de IA. Según reportes, Microsoft ha invertido 13.000 millones de dólares en OpenAI.
Los reguladores de la UE indicaron el mes pasado que revisarían la alianza según las normas antimonopolio del bloque de 27 países, y también las autoridades británicas de competencia están estudiando el acuerdo.
Microsoft asumió su puesto en la junta tras una lucha de poder en la que el director general de OpenAI, Sam Altman, fue despedido y rápidamente contratado de nuevo mientras los miembros de la junta que habían impulsado su despido eran expulsados.
“En los últimos ocho meses hemos presenciado un progreso significativo de la junta recién formada y tenemos confianza en el rumbo de la compañía”, dijo Microsoft en su carta. “Dado todo esto, no creemos que nuestro papel limitado como observador siga siendo necesario”.
Con la salida de Microsoft, OpenAI ya no tendrá puestos de observador en su junta.
“Damos las gracias a Microsoft por expresar confianza en la junta y la dirección de la compañía, y estamos deseando continuar con nuestra exitosa colaboración”, dijo OpenAI en un comunicado.
No es difícil relacionar...