El Sevilla ha completado esta mañana su segundo entrenamiento después de la semana de descanso que ofreció García Pimienta a sus jugadores por las fiestas navideñas. En la misma, el entrenador ha podido ver al ritmo del resto de sus compañeros a los dos delanteros de la primera plantilla: Isaac Romero y Kelechi Iheanacho. El lebrijano tenía ciertas molestias en la espalda y no salió del gimnasio el domingo por la tarde, aunque se ha podido comprobar que con ese dolor puede entrenar con el resto de sus compañeros y estará en la lista de convocados para jugar en Almería el próximo sábado. Se trata de la primera cita del 2025 y a la que el club le coloca una especial importancia, ya que es la otra competición que disputa el equipo esta temporada y el rival es de menor categoría, por mucho que se trate del líder de la Liga Hypermotion . Las bajas siguen siendo las mismas que días atrás, por mucho que Djibril Sow esté acortando los plazos para ayudar los antes al Sevilla . Nianzou y Ejuke siguen fuera de combate y García Pimienta deberá ir perfilando con qué equipo acude al estadio almeriense, donde por fin podrá contar con Pedrosa en el lateral, lo que le debe ayudar a la hora de conformar una línea defensiva de garantías, pudiendo sacar a Kike Salas del costado , donde no se encuentra del todo cómodo. Al no haber jornada de Liga hasta el siguiente fin de semana, el preparador nervionense podrá salir con un once tipo en la Copa y olvidar las alineaciones de rondas anteriores. Con quien ya no puede contar es con el capitán, Jesús Navas. Quien recibe su particular homenaje en el Sánchez-Pizjuán , donde también estará con sus actuales compañeros (hasta mañana) y algunos históricos en su paso por el Sevilla. También siguen trabajando con el resto del grupo jugadores que están en la rampa de salida , como el propio Iheanacho , a quien su entrenador sigue defendiendo en cuanto a la implicación, aunque sabe que no puede darle más oportunidades que a García Pascual, en dinámica del primer equipo. Un caso parecido al de Valentín Barco , al que su entorno no oculta en negociaciones con el Oporto , pero que debe seguir trabajando hasta que se termine de concretar su adiós definitivo.