«La actitud de Vinicius no es adecuada. Que nos haga el gesto de 'A Segunda' es muy duro para nosotros». Raúl Martín Presa , presidente del Rayo Vallecano, mostró este domingo en declaraciones al programa 'Tiempo de juego' de la Cadena Cope la indignación de la afición y el club rayistas por la escena que protagonizó el jugador brasileño del Real Madrid cuando se retiraba del campo una vez finalizado el partido de Liga jugado el sábado por la noche en Vallecas. Vinicius , increpado por varios espectadores, les respondió expresando su deseo de que el Rayo descienda a Segunda división mediante claros y ostensibles gestos con la mano derecha. El atacante madridista volvió a exhibir su peor versión en el apartado de comportamiento y deportividad. Fue suplente y apenas jugó media hora (sustituyó a Brahim en el minuto 63), pero durante ese corto periodo vio una tarjeta amarilla y pudo haber sido expulsado si el árbitro, Martínez Munuera , llega a apreciar como «menosprecio» las desaforadas formas en las que se dirigió a él tras sufrir un claro agarrón. El colegiado, aplicando la ley de la ventaja, dejó seguir la jugada. Cuando esta finalizó, Vinicius reclamó una tarjeta amarilla para Balliu , rival que le había hecho la falta. Lo hizo con tan escandalosos aspavientos, que Munuera le amonestó a él. El brasileño, más enfadado aún, se encaró con el trencilla y, según se aprecia en las imágenes de vídeo, parece decirle «foda-se», expresión en portugués que viene a significar, en una traducción amable, «vete a la mierda». El asunto no pasó a mayores, pero minutos después los jugadores del Real Madrid , y el propio club, a través de sus redes sociales y su canal, 'Real Madrid TV', reclamaron un penalti de Mumim al propio Vinicius. No fue señalado, y el delantero suramericano se enfadó todavía más. Y lo acabó pagando con el Rayo y con sus seguidores.
