«No ha habido historia», resumía Rafael Nadal su primer partido en la edición de Roland Garros 2014. Fue ante Robby Ginepri , estadounidense y 279 del mundo que le tocó el regalo de enfrentarse al balear después de que un accidente en bicicleta estuviera a punto de acabar con su carrera. Fue un 6-0, 6-3 y 6-0 que sirvió a Nadal para encarrilar la forma física hacia un título en el que, de nuevo, no parecía tener rival. Dio otra lección en segunda ronda, pero contra un alumno aventajado que aprendería tanto que, años más tarde, incluso lo retaría en la final: Dominic Thiem . Pero en ese 2014, el austriaco tenía 20 años y era la primera vez que pisaba la Philippe Chatrier: «Era raro porque lo máximo que había sentido eran como unos 7.000 espectadores en Viena. Aquí era muchas muchas más y fue algo sorprendente. Y tener un plan contra Nadal aquí... es muy difícil. Muchos jugadores lo han intentado, ¿no? Y casi ninguno lo ha conseguido. Nadal en la Chatrier no es solo el reto más difícil del tenis, sino de todo el deporte. Solo hay que pensar que es solo una derrota y 62 victorias, y ocho títulos. Eso es increíble. No quiero pensar mucho en eso, pero tiene sus consecuencias, sobre todo porque le da mucha confianza». Noticias Relacionadas estandar No Tenis Djokovic firma otra gesta al sobrevivir al cansancio y a Cerúndolo para pasar a cuartos estandar No Alcaraz, con la cabeza alta: «Buscamos ganar el torneo, otra cosa sería un sabor agridulce» Fue un partido fácil para el balear (6-2, 6-2 y 6-3) aunque el austriaco dejó muestras de lo que llegaría después. Lo curioso es que tras el encuentro, Nadal lanzó una profecía que él mismo se encargó de desbaratar en el futuro. «Yo tengo 27 años, Djokovic 26, Federer 32; Thiem tiene 20, las nuevas generaciones están llegando. Y nosotros no vamos a estar diez años más». Código Desktop Imagen para móvil, amp y app Código móvil Código AMP Código APP Él no miraba más allá del siguiente día: un Leonardo Mayer que no lo puso en problemas (6-2, 7-5 y 6-2), y en el siguiente: un Dusan Lajovic que todavía le aguantó menos (6-1, 6-2 y 6-1). Al siguiente, David Ferrer , que todavía tenía muy presente la final del año pasado cuando se le hizo enorme el escenario y el contrincante. Por eso el alicantino salió a por todas, y sorprendió al balear con un primer set arrollador. Pero no le llegó el físico ni el empuje para mucho más allá (4-6, 6-4, 6-0 y 6-1). Tampoco sufrió en semifinales, con un Andy Murray 8 del mundo que solo acertó a ganarle seis juegos (6-3, 6-2 y 6-1). Para la final, claro, Novak Djokovic . «Un partido realmente complicado y contra el rival más peligroso, el que más veces nos ha ganado y que nos había cogido otra vez la medida. Empezamos mal y el segundo set costó muchísimo, pero ganarlo nos dio mucha confianza. A partir de ahí, pasamos a controlar la situación y fue una gran alegría», compartía Toni Nadal. Porque ya era el serbio una pesadilla para el balear. Desde el último partido del US Open 2013, Djokovic encadenó otras cinco finales ganadas sobre el español, al que, por supuesto, no le hacía ninguna gracia chocar de nuevo con él para luchar por el título. Código Desktop Nadal's hilarious response to the question:
"Are you glad Novak Djokovic exists?" pic.twitter.com/JmxGSmb03M— The Tennis Letter (@TheTennisLetter)
September 25, 2022
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Fue un 3-6, 7-5, 6-2 y 6-4 de tres horas y media de tensión inicial y alivio después. De sentirse inferior por los golpes del serbio, pero de crecerse en la batalla mental en la que se convirtió el segundo parcial. Con 5-5, ahí donde se demuestra quién está elegido para ser leyenda, se entrampó Djokovic, enfadado con el público y fallón como no lo había sido hasta ese momento. A partir de ahí, Nadal se liberó y se volvió enorme para el serbio, que quedó anulado y envuelto en temblores, tanto como para acabar la final con una doble falta. MÁS INFORMACIÓN noticia No 2012, el séptimo Roland Garros de Nadal: De paseo hasta Djokovic y una final que termina en lunes noticia No 2011, el sexto Roland Garros de Nadal: Isner tambalea el sueño de igualar a Borg noticia No 2010, el quinto Roland Garros de Nadal: La venganza ante Soderling noticia No 2008, el cuarto Roland Garros de Nadal: La mayor paliza ante el mayor rival noticia No 2007, el tercer Roland Garros de Nadal: Borrón y título nuevo tras 81 triunfos seguidos noticia No 2006, el segundo Roland Garros de Nadal: del primer Soderling al finalista Federer noticia No 2005, el primer Roland Garros de Nadal: Con Burgsmuller empezó todo Una doble falta con la que Nadal engrandecía su superioridad en Roland Garros, alcanzaba a Pete Sampras con su decimocuarto Grand Slam y defendía el número 1. Y desbarató su propia profecía porque sí, sí estuvo en Roland Garros diez años después de aquella segunda ronda ante Thiem.