Se estima que en España hay aproximadamente 20.000 castillos, una cifra increíble que demuestra la gran capacidad de conservación de estas fortalezas. Nuestro país ha sido hogar de castillos desde la época en la que los visigodos habitaban sus tierras, pero con el paso del tiempo y tras la llegada de los musulmanes, la cantidad de castillos creció notablemente.
Si te preguntan por una gran fortaleza, quizás la primera que se te venga a la cabeza sea el imponente Alcázar de Segovia. Y si hablamos de las ciudades españolas con más castillos deberíamos viajar a Jaén y Granada, pero más allá de los grandes y famosos existen un sinfín de castillos espectaculares que bien merecen una visita.
Para encontrar uno de esos castillos que te dejan sin palabras tenemos que viajar hasta Huelva, concretamente al pequeño pueblo de Cortegana. Este municipio está ubicado en el entorno natural del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche y muy cerca de la frontera con el país vecino, Portugal. Los casi 5.000 habitantes de este encantador pueblo conviven con un edificio muy especial.
En la parte superior de Cortegana habita una fortaleza con cientos de años de historia que protagoniza las vistas panorámicas más increíbles de la zona y que deja sin palabras a todo el que lo visita. Este edificio tiene una cualidad que lo hace único: se trata del castillo mejor conservado de la provincia de Huelva.
Este castillo recibe el nombre de Sancho IV el Bravo o Cumbres Mayores, y su origen se remonta al año 1293 cuando el territorio pertenecía a Sevilla. Fue entonces cuando su consejo autorizó la creación de una fortaleza en la Ribera del Sillo con la que serían capaces de vigilar la frontera y proteger su territorio.
Así es, este castillo lleva en pie desde el siglo XIII y actualmente se pueden apreciar gran parte de las construcciones originales. Su planta de ocho lados cuenta con ocho grandes e impresionantes torres macizas que mezclan formas circulares y cuadradas perfectas para vigilar todo el terreno y conseguir las mejores vistas del pueblo de Cortegana y su paisaje natural.
La torre de San Miguel era la encargada de abrir las puertas de la fortaleza para todos aquellos visitantes de la época y también actuales. Los grandes portales que hacían de segunda entrada al castillo eran uno de los elementos más destacados en la época de su creación, debido a la belleza de sus arcos. Por otro lado, la llamada puerta del Sol contaba con una representación del sol y la luna tallados tanto en la piedra como en la madera del portón.
La espectacular conservación del castillo de Cumbres Mayores de Cortegana se debe en gran parte a las numerosas reformas y remodelaciones que se han realizado con el paso del tiempo. La primera de ellas fue en el siglo XV, cuando mejoraron la muralla y los torreones. Pero esa no es la única, entre los años 1973 y 1999 diversas consejerías y ministerios se encargaron de restaurar algunos elementos que necesitaban mejoras y que han hecho que a día de hoy este castillo sea el mejor conservado de Huelva.