Los frutos secos han conseguido hacerse un hueco en nuestras dietas, por su delicioso sabor, sus muchas variedades y también por los beneficios que aportan a nuestra salud gracias a sus muchas propiedades. En España, el fruto seco más consumido son las nueces, seguido de los cacahuetes y las almendras, aunque son muchas las personas que no pueden escoger y prefieren optar por los surtidos, en los que puedes disfrutar de varios de ellos.
Es habitual tomarlos solos, son el complemento ideal para media mañana, reduciendo el apetito y ayudando a aportar energía para pasar el día, pero cada vez es más frecuente incluirlos en recetas, como las de desayuno, añadiendo un pequeño puñado a nuestro bol con yogur y frutas. También es habitual encontrarlos en recetas más elaboradas o como parte del aliño para las ensaladas. Eso sí, a pesar de que sean un bocado delicioso y saludable, conviene tomarlos con moderación, y siempre mejor crudos que tostados.
Los piñones son las semillas que se encuentran en el interior de las piñas, por lo que es posible hacernos con un buen puñado si hacemos una escapada al campo y nos encontramos con un pino piñonero. Si somos un poco más urbanitas tampoco hay problema porque podemos encontrarlos en casi cualquier tienda, lo que además nos evitará la molestia de tener que pelarlos, porque en la naturaleza los encontramos cubiertos de una dura protección que hay que retirar para poder comerlos.
Un pequeño esfuerzo que merece la pena si tenemos en cuenta sus muchos beneficios, que cada vez son más conocidos y reconocidos. Contienen una gran cantidad de nutrientes esenciales para el organismo, son una fuente de ácidos grasos omega-9 y omega-3, que ayudan a prevenir los trastornos cardiovasculares, también presentan una alta concentración de antioxidantes, vitamina E y fenoles, que además de luchar contra el envejecimiento tienen un impacto positivo en la salud.
Los piñones ayudan a disminuir los niveles de triglicéridos y LDL o colesterol malo, porque reducen la absorción del colesterol gracias a sus fitoesteroles, lo que mejora el perfil lipídico en sangre. Estos frutos secos aportan zinc, de magnesio y de hierro, lo que favorece las defensas, además es saciante, gracias a la fibra que contiene, por lo que muchas dietas pensadas para perder peso no dudan en incluirlos entre los alimentos que conviene tomar, siempre en el marco de una alimentación variada y equilibrada.
Como sucede con todos los frutos secos, a pesar de lo beneficiosos que son, conviene tomarlos con moderación porque aportan muchas calorías. La cantidad diaria que se suele recomendar de todos ellos es un puñado y los piñones no son una excepción.
Aunque se pueden comer directamente sin tener que mezclarlos con nada, gracias a su sabor suave, los piñones pueden usarse tanto en recetas dulces como saladas. Son ideales acompañando a verduras, carnes o setas, también añadidos en ensaladas, aunque lo más habitual es tomarlos en dulces como los panellets y, sobre todo, emplearlos para hacer salsa pesto, donde son uno de los ingredientes principales.
Los frutos secos y el corazón: comer frutos secos para la salud del corazón. (2023c, noviembre 15). Mayo Clinic. https://www.mayoclinic.org/es/diseases-conditions/heart-disease/in-depth/nuts/art-20046635