(CNN) — Era el primer gran día de la lucha por el Medio Oeste que probablemente decida las elecciones de 2024, y faltaba alguien importante: el expresidente Donald Trump.
El candidato republicano dejó en manos de su compañero de fórmula vicepresidencial, el senador de Ohio J.D. Vance, la tarea de trolear a la recién designada candidatura demócrata por el crítico territorio de los estados indecisos este miércoles, mientras arrancaba como nueva la campaña electoral de 90 días por la Casa Blanca.
Cómo Tim Walz, un discreto gobernador del Medio Oeste, llegó a la cima para ser el vicepresidente de Kamala Harris
La vicepresidenta Kamala Harris y su nuevo compañero de fórmula, el gobernador de Minnesota Tim Walz, celebraron dos mítines llenos de energía en Wisconsin y Michigan que mostraron la euforia que reina en un Partido Demócrata que antes estaba desesperanzado por sus dos nuevos candidatos.
La candidata demócrata tomó prestado un truco del libro de jugadas de Trump, realizando una dramática escena de llegada a bordo del Air Force Two en Michigan que reflejaba el uso del avión presidencial más grande antes de un mitin en un aeropuerto lleno de gente. Por segundo día consecutivo, Harris se presentó ante miles de partidarios entusiasmados que dieron una señal de alarma colectiva a Trump, conocido por obsesionarse con el tamaño de las multitudes. Parecía estar asentándose rápidamente en su nuevo papel como candidata oficial de su partido, mostrando destellos de carisma y una creciente confianza mientras su luna de miel política no daba señales de terminar.
El expresidente Donald Trump habla en un mitin de campaña el 20 de julio en Grand Rapids, Michigan. (Crédito: Evan Vucci/AP)
El equipo de Trump comienza su contraataque
El equipo de Trump, por su parte, dio pistas sobre cómo planea frenar el impulso de Harris y desacreditar a su nuevo compañero de fórmula, a quien Harris se deleita en destacar como entrenador, veterano y arquetipo de padre del Medio Oeste.
El expresidente se ha esforzado por encontrar una forma de responder al repentino cambio de su oponente después de que el presidente Joe Biden cediera a los temores demócratas de que era demasiado viejo para un segundo mandato. Las afirmaciones de Trump de que Harris no es realmente negra y su deliberada deformación de su nombre en publicaciones juveniles en las redes sociales como “Kamabla” sólo subrayan cómo parece ir a la deriva.
Trump llamó este miércoles a su lugar seguro en Fox News desde su club de Florida para afirmar que estaba “encantado” de que Harris hubiera elegido a Walz, tachando al equipo demócrata de radical y demasiado a la izquierda para Estados Unidos. “Esta es una candidatura que querría que este país se volviera comunista inmediatamente, si no antes”, dijo Trump. Sus ataques, sin embargo, fueron en su mayoría desenfocados y de eficacia limitada, ya que volvió a fracasar a la hora de exponer argumentos claros y concisos contra su rival.
J.D. Vance arremete contra Kamala Harris en Minnesota: Los medios de comunicación “la presentan como Martin Luther King Jr.” , pero es una “liberal chiflada”
Vance fue más forense. En Eau Claire, Wisconsin, celebró un acto mucho más reducido que el mitin al aire libre de Harris, pero en el que abordó directamente las principales preocupaciones económicas que ocupan a los votantes de la región, como los altos precios, el coste de la vivienda y la energía y los alimentos. “Sé que podemos hacerlo mejor. Lo estábamos haciendo mejor cuando Donald J. Trump era presidente”, dijo Vance. En un nuevo giro retórico, prácticamente ignoró a Biden y siguió refiriéndose al “Gobierno de Harris”, dando a entender que la vicepresidenta era el verdadero poder en la Casa Blanca.
Harris demostró en la misma ciudad del oeste de Wisconsin que entiende que los problemas económicos que atormentaron a la administración Biden, a pesar del fuerte repunte posterior al covid-19, son una gran preocupación. “Seguiremos luchando por una vivienda asequible, por una sanidad asequible, por guarderías asequibles y permisos retribuidos”, dijo a la multitud. “Aunque nuestra economía va bien, en muchos aspectos, los precios de las cosas cotidianas, como los comestibles, siguen siendo demasiado altos. Ustedes lo saben y yo lo sé”.
Cómo creen Vance y Trump que pueden hacer tropezar a Harris
En otro frente de su incipiente ofensiva contra Harris, la campaña de Trump aumentó la presión sobre la vicepresidenta para que concediera una importante entrevista a los medios de comunicación, aparentemente con la esperanza de incitarla a un foro en el que históricamente ha sido más vulnerable que cuando pronuncia discursos guionizados.
“Creo que es realmente vergonzoso, tanto para Kamala Harris como para muchos de los medios de comunicación estadounidenses que participan en estas cosas, que una persona que ha sido la posible candidata del Partido Demócrata durante 17 días se niegue a aceptar una sola pregunta de los medios de comunicación estadounidenses”, dijo Vance en Wisconsin.
Trump dice que tiene que “trabajar duro para definir” a Harris
Harris, especialmente al principio de su vicepresidencia, a veces vacilaba en entrevistas y momentos no guionizados, y la campaña de Trump lo ve claramente como una forma potencial de frenar su fuerte comienzo. Pero con la Convención Nacional Demócrata a la vuelta de la esquina, en menos de dos semanas, parece que hay pocos incentivos para que Harris se arriesgue, sobre todo porque los demócratas pueden argumentar, al menos por ahora, que la vicepresidenta ha estado dedicando su tiempo a construir frenéticamente una nueva campaña y a buscar apresuradamente un compañero de fórmula. Pero una posición así será difícilmente sostenible a largo plazo, y Harris se verá presionada para demostrar que está cualificada para ejercer de presidenta, especialmente en un contexto de crecientes desafíos al poderío estadounidense en el extranjero.
La forma en que Vance está persiguiendo a la vicepresidenta a través de los terrenos políticos más disputados del país quedó ilustrada en un momento bastante extraño este miércoles. Cuando llegó a Wisconsin y vio el Air Force Two en la pista, se dirigió hacia el avión en lo que, según dijo más tarde, fue un intento de hablar con la vicepresidenta. “Sólo quería echar un vistazo a mi futuro avión”, dijo.
¿Dio Trump un giro sobre un segundo debate?
Hubo otra señal este miércoles de las arenas políticas cambiantes bajo la campaña. Días después de decir que se negaría a participar en un debate presidencial previamente acordado en ABC y exigir que Harris se reuniera con él en Fox, el expresidente mostró una nueva apertura a un enfrentamiento cara a cara.
“Debatiremos con ella, supongo, en un futuro bastante cercano. Se anunciará bastante pronto, pero nos enfrentaremos a ella”, dijo en su entrevista en la cadena Fox, dejando abierta la posibilidad de que se produzca en otra cadena.
“Lo haría ahora mismo, porque quiero debatir con ella. Creo que es importante para el país que debatamos”, afirmó. Tras intentar dictar los términos de un enfrentamiento en el canal de noticias conservador, Trump añadió entonces: “Creo que Fox lo haría muy bien, pero tienen que ponerse de acuerdo dos personas”.
La lucha por los votantes rurales
Harris parece ver en Walz una baza inestimable para cortejar a los votantes de fuera de las zonas demócratas tradicionales.
“¿No es increíble?”, preguntó Harris a otra multitud enardecida en Detroit este miércoles por la noche.
Su campaña, por su parte, publicó un memorando de su director para los estados disputados, Dan Kanninen, que predijo la lucha que se avecina por los estados indecisos. “Estamos compitiendo en todas partes porque sabemos que tenemos que reducir los márgenes en las zonas rurales para ganar”, decía la nota. Kanninen argumentó que Walz estaba en una posición ideal para liderar la búsqueda de estos votantes, señalando que había “representado a un distrito republicano en el sur de Minnesota durante seis mandatos en el Congreso” y que históricamente había superado a los demócratas nacionales en su distrito de la Cámara, incluso en áreas que apoyaban a Trump. Esto, decía la nota, ofrecía un “modelo de cómo recortar márgenes en las zonas rurales de todo el país”.
Así han sido las políticas progresistas de Tim Walz como gobernador de Minnesota
Pero la campaña de Trump está tratando de convertir a Walz en un lastre para la vicepresidenta. Se pasó todo el día tratando de hacer de él un extremista político antitético con el estadounidense promedio en materia de delincuencia, inmigración y políticas sociales.
Los aliados de Trump, por ejemplo, están llamando la atención sobre una nueva ley de Minnesota que obliga a las escuelas públicas a tener productos menstruales en los baños de chicos y chicas, en un esfuerzo por pintar a Walz como un progresista de extrema izquierda por acomodar a los estudiantes transgénero. Y los republicanos se han centrado en su gestión de los disturbios en Minneapolis tras el asesinato de George Floyd, acusándole de esperar demasiado para llamar a la Guardia Nacional del estado. Trump, sin embargo, elogió la respuesta de Walz en una llamada de 2020 con los gobernadores, socavando algunas de esas líneas de ataque.
“Tenemos mucho trabajo por hacer”: Harris en su primer mitin con Walz 0:59
Una disputa sobre el servicio militar
Vance intensificó sus ataques contra el retrato de Walz de su carrera militar, acusándolo de eludir el servicio en Iraq cuando dejó la Guardia Nacional y se postuló para el Congreso en 2005.
“Cuando el Cuerpo de infantería de Marina de Estados Unidos, cuando Estados Unidos me pidió que fuera a Iraq a servir a mi país, lo hice. Hice lo que me pidieron, lo hice honorablemente y estoy muy orgulloso de ese servicio. Cuando su país le pidió a Tim Walz que fuera a Iraq, ¿saben lo que hizo? Abandonó las Fuerzas Armadas y permitió que su unidad fuera sin él”, dijo Vance.
Walz presentó la documentación ante la Comisión Electoral Federal como candidato al Congreso el 10 de febrero de 2005. Al mes siguiente, después de que la Guardia Nacional anunciara un posible despliegue en Iraq en un plazo de dos años, la campaña de Walz emitió un comunicado en el que decía que tenía intención de seguir en la carrera.
ANÁLISIS | Por qué Kamala Harris eligió a Tim Walz como su compañero de fórmula
La candidata demócrata a la presidencia, la vicepresidenta Kamala Harris, y el candidato demócrata a la vicepresidencia, el gobernador de Minnesota Tim Walz, aparecen juntos en el escenario durante un acto de campaña en el Girard College el 6 de agosto de 2024, en Filadelfia, Pensilvania. (Crédito: Andrew Harnik/Getty Images)
Walz sirvió 24 años en la Guardia Nacional, retirándose en mayo de 2005, según la Guardia Nacional de Minnesota. Los miembros de las Fuerzas Armadas suelen presentar sus documentos de jubilación meses antes de la fecha de retiro. No está claro cuándo presentó Walz sus papeles para la jubilación. Un artículo de la Guardia Nacional sobre el despliegue de su unidad afirma que recibió órdenes de alerta para desplegarse en Iraq en julio de 2005, dos meses después de que Walz se retirara.
Vance sirvió cuatro años en la Infantería de Marina como corresponsal de combate alistado, en asuntos públicos, y se desplegó una vez en Iraq durante unos seis meses, según su historial militar. Dejó el servicio en septiembre de 2007 como cabo.
El republicano de Ohio también acusó a Walz de afirmar falsamente que había servido en una zona de combate, señalando los comentarios del gobernador sobre su apoyo a la prohibición de las armas de asalto. “Podemos asegurarnos de que esas armas de guerra, que yo porté en la guerra, es el único lugar donde están esas armas”, dijo el gobernador en un video promovido por la campaña de Harris. Walz se desplegó con la Guardia Nacional de Minnesota en agosto de 2003 en Vicenza, Italia, como parte del apoyo a la guerra de Estados Unidos en Afganistán, según un portavoz de la Guardia Nacional de Minnesota. Walz no estuvo en Afganistán ni en Iraq ni en ninguna zona de combate como parte de su servicio.
La advertencia de Biden
El espectáculo de un veterano militar enfrentado por el servicio de otro fue una señal de la amarga lucha política que se avecina en unas elecciones que tienen enormes implicaciones para el país.
En ese sentido, Biden lanzó una nueva advertencia sobre las posibles amenazas de Trump a la democracia, en una intervención en una campaña en la que él fue una figura central pero ahora está marginado.
El presidente, en su primera entrevista desde que puso fin a su intento de reelección, dijo a CBS News que no confía en que haya una transición pacífica del poder si Trump pierde en noviembre.
“Quiero decir, si Trump pierde, no confío en absoluto. Él piensa lo que dice”, dijo Biden.
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