La cuestión inmigratoria no es una inquietud desconocida en la esfera convergente. Ya en 2002, Jordi Pujol alertó de que "no se puede permitir que la inmigración destruya nuestra identidad". Más recientemente, en 2023, el 'expresident' también pronosticó que los "catalanes podían acabar minorizados" ante "tanta y tanta inmigración". Ahora, las tesis pujolianas han retornado con fuerza en la formación, en parte por sus convicciones identitarias a veces excluyentes—como han evidenciado en relación a los catalanes castellanohablantes y al resto de españoles—, y en parte para no per ...