Los sabios de la geopolítica saben que la deriva de determinados conflictos es imprevisible. El que está abierto en canal en Oriente Medio, tras el ataque de Irán a Israel, es uno de ellos y puede tener consecuencias más o menos profundas en las economías occidentales. La hoja de ruta que el Gobierno de Pedro Sánchez ha marcado para la española se basa en un escenario de retroceso de la inflación y una mejora de las condiciones financieras. En esa previsión es clave la evolución de los precios energéticos, el factor que más golpeó a la economía de la Eurozona tras la invasión ru ...