El 23 de julio de 1999 Mohamed VI sucedía a su padre, Hassán II, como rey de Marruecos. En los 25 años transcurridos desde entonces, el reino alauí ha experimentado muchos cambios pero sus ciudadanos aún sufren los estragos de la pobreza, la mala situación económica y la persistente corrupción, hasta el punto que más de la mitad de los jóvenes se han planteado abandonar el país en busca de un futuro mejor. La radiografía que ofrece del reino alauí el último Afrobarómetro publicado el pasado mes de junio es la de un país que ve con preocupación cómo su economía no termina ...