"Insolvente”, “mala fe”, “obstruccionista”… El ‘moderado’ Pedro Sánchez ejerció en el Senado de radical –parecía el jefe de la oposición, jaleado por los suyos y sus socios que, coincidencias de la vida, contaba desde ayer con Susana Díaz, que prometió su cargo con un beso de Sánchez- y dedicó casi una hora a acusar a Alberto Núñez Feijóo de actuar en contra de los intereses de España y de mentir una y otra vez para intentar descalificar las medidas del Gobierno. El presidente se pasó de frenada en un debate que no fue tal y que tuvo tintes de encerrona: más ...