El verano en la Comunidad Valenciana ha venido marcado por los graves incendios que han arrasado más de 33.000 hectáreas y han suscitado el debate sobre la eficacia o no de la gestión medioambiental que está llevando a cabo el Gobierno valenciano de Ximo Puig. La Generalitat ha tratado de centrarse en la rápida concesión de ayudas a los municipios afectados en cuanto haya una valoración de los daños –aprobadas en un pleno extraordinario el pasado martes– y el Gobierno también con la declaración de zona catastrófica. Pero el incidente del tren que atravesó las llamas del ince ...