Dicen que cuanto peor es la tragedia, mayor es la mentira necesaria para ocultarla. Quizá el aborto sea la mayor prueba de ello. Desde que el Tribunal Supremo de los EE.UU. sentenció que el aborto no es un derecho constitucional al no estar recogido específicamente en la misma y por tanto deberá ser regulado en cada Estado, las reacciones de una histeria difícilmente compren ...