El Gobierno apura los últimos minutos para revisar su cuadro macroeconómico, en el que deberá pegar un buen tijeretazo a su previsión de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB). El plazo se agota este sábado 30 de abril, fecha límite para enviar a Bruselas el Programa de Estabilidad actualizado. Mientras tanto, hace oídos sordos a las amenazas que la guerra en Ucrania y la escalada de precios suponen para la economía y las omite en el último informe que el Tesoro ha publicado para los inversores extranjeros, referente al mes de abril ...