Advierte de que si se miran las horas trabajadas, en lugar del número de ocupados, se aprecia un aumento del paro mucho mayor
El Banco de España ha advertido en su último informe trimestral de la economía española de que la tasa de paro que recoge la Encuesta de Población Activa (EPA) llegará al 20% en el segundo trimestre, con datos de marzo a junio, y eso sin contar con los trabajadores afectados por Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que no computan como parados.
"La tasa de paro experimentará un aumento significativo en el segundo trimestre. El paro registrado creció un 23,2% en el promedio de abril y mayo. Este aumento sugiere que la tasa de desempleo, que en el primer trimestre fue del 14,4% de la población activa, según la EPA, podría acercarse al 20% en el segundo", advierte el supervisor.
En su última actualización de las previsiones, esta institución pronosticaba un incremento de la tasa de paro hasta el 23,6% en el peor de los escenarios a cierre de 2020, con lo que elevar la previsión de paro al 20% ya para cierre de junio podría implicar un empeoramiento de las estimaciones para el conjunto del año, que no se recogen en este nuevo documento.
La institución que gobierna Pablo Hernández de Cos recuerda que "bajo ciertas condiciones, los trabajadores en situación de ERTE no se consideran, en aplicación de los criterios estadísticos europeos, como desempleados, en la medida en que mantienen una vinculación con su empresa", por lo que recomienda prestar atención a la disminución de horas trabajadas para conocer con exactitud cómo evoluciona el empleo. La EPA, en este caso, oculta la radiografía real del mercado laboral, como ya contó Vozpópuli.
De hecho, si bien los datos de afiliación mostraron una recuperación del empleo en el mes de marzo, el supervisor advierte de que "el descenso del empleo, cuando se mide en términos de las horas trabajadas,
habría sido aproximadamente del 20%".
El Banco de España ha mantenido su previsión de evolución del PIB para este año sin cambios: cree que caerá un 9% en el mejor de los escenarios (si la recuperación es temprana), un 11,6% si la recuperación es gradual y que se desplomará un 15,1% en un escenario de riesgo.
Aunque no actualiza esas cifras, sí advierte de que "solamente en el escenario de recuperación temprana, el nivel del PIB al final de 2022 superaría al previo a la crisis, lo que subraya la posibilidad de que las consecuencias de la crisis tengan un componente duradero".
Si se tiene en cuenta que el propio De Cos ha dado como poco probable el escenario de recuperación temprana, parece posible que el PIB de España siga dentro dos años por debajo del nivel de 2019.
El Banco de España advierte de que la pandemia ya se está dejando notar en las cuentas públicas, para las que había pronosticado un déficit elevado en 2020.
"El deterioro de las cuentas públicas se acentuará notablemente en el segundo trimestre del año, de modo que, según las proyecciones más recientes del Banco de España, el déficit público que fue del 2,8% del PIB en 2019, podría alcanzar en 2020 cifras del 9,5% y del 11,2%, respectivamente, en los escenarios de recuperación temprana y gradual", apunta.
