El expresidente Donald Trump ya es oficialmente el candidato republicano a las próximas elecciones en EEUU, después de que este jueves haya aceptado su nominación en la Convención Nacional Republicana. En su discurso, el primero tras el intento de asesinato, lanzó un mensaje de fuerza y unidad y relató cómo vivió los momentos del disparo, una narración que asegura que no volverá a pronunciar porque le causa «mucho dolor».
«Me presento ante ustedes esta noche con un mensaje de confianza, fuerza y esperanza. (…) Me presento a presidente para todo Estados Unidos, no para la mitad, porque no hay victoria ganando solo la mitad», dijo con su oreja derecha todavía vendada.
El magnate neoyorquino llegó a la ciudad un día después de haber sido herido de bala el sábado en Butler (Pensilvania) y él mismo admitió que tras lo sucedido reescribió su discurso.
Trump prometió un gobierno que sirva a los estadounidenses «mejor que nunca»: «Nada me detendrá en esta misión porque nuestra visión es justa y nuestro rumbo puro», sostuvo.
La palabra lucha (fight, en inglés) se ha popularizado como clamor republicano. El expresidente la dijo puño en alto el sábado mientras era evacuado por las fuerzas del orden, como él mismo recordó este jueves en un relato de lo sucedido.
Un relato que, aseguró, no pronunciará más porque le resulta «demasiado doloroso». Contó cómo sigue vivo por haber girado la cabeza para enseñar un gráfico sobre inmigración y aseguró que aunque había sangre por todas partes, en cierta manera se sintió «muy seguro» porque percibía a Dios de su lado.
Agencia EFE
