El coste del rescate de los espeleólogos en Cantabria: 125 personas, drones, vehículos y dos helicópteros

El Gobierno estipula un coste de 1.906 euros por hora por el uso del helicóptero y de 114 euros la hora por el dispositivo de rastreo o búsqueda.

El coste total del rescate de más de 24 horas de los espeleólogos Alfonso Urrutia y Paloma Bombín (que salieron ilesos de la cueva cántabra de Soba en la que se habían perdido) y que necesitó de un equipo de 125 efectivos y 27 vehículos, además de drones y dos helicópteros, se desconoce. El Gobierno cántabro fija algunas de estas tarifas que, dependiendo de varios criterios, asume la Administración o traslada a los espeleólogos.

• Ayuda múltiple. El operativo contó con ayuda de los miembros del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM) de la Guardia Civil y de la Unidad Militar de Emergencias (UME), ya que la cavidad se considera como “compleja técnicamente” por el Gobierno cántabro.

Desde Newtral.es hemos consultado al Gobierno de Cantabria el coste final del operativo, pero no hemos obtenido respuesta por el momento.

¿Cuál es el coste del operativo de rescate de los espeleólogos? La ley cántabra de medidas fiscales y administrativas incluye tres conceptos y tarifas: 

• Helicóptero. Por derechos de salida para la prestación de un servicio, la primera hora tiene un coste de 1.906,41 euros, igual que la segunda o “fracción de hora”.
• Operativos. Por establecimiento del dispositivo de rastreo o búsqueda, las tres primeras horas: 113,99 euros y por cada hora adicional 57,01 euros la hora.
• Extras. Servicio prestado de espeleosocorro: hasta las seis primeras horas: 569,97 euros y por cada hora adicional 113,99 euros la hora. 

¿Quién asume el coste del rescate de los espeleólogos? Tal y como dispone la ley, las tasas serán asumidas por la Administración cántabra excepto en los siguientes supuestos, cuando deberán ser costeadas por los beneficiarios de los servicios prestados:  

1. Actividades que aumenten el riesgo durante alertas meteorológicas adversas.
2. Inobservancia de señales de advertencia en zonas peligrosas o de acceso restringido.
3. Realización de actividades sin los permisos o autorizaciones necesarios.
4. Falta de equipamiento esencial para la actividad.
5. No informar al 112 antes de entrar en cuevas, torcas o simas.

Este último punto es la clave. No informar al 112 es motivo para asumir el coste del rescate. En este caso, ese aviso sí se produjo, pero no por parte de los espeleólogos, sino de un amigo, que había sido previamente avisado por estos de que se disponían a entrar en la cueva.