Las picaduras de medusas provocan un dolor intenso y punzante que irrita la piel y genera una herida.
Las picaduras de medusa son uno de los principales riesgos asociados a las vacaciones de verano en la playa, según el Ministerio de Sanidad. Estos organismos viven suspendidos en el agua y llegan a las costas arrastrados por las corrientes o los vientos de mar a tierra.
Por qué pican las medusas. Las medusas tienen unas células urticantes llamadas cnidocitos. Estas células contienen un veneno que el animal libera para defenderse de algún peligro o para capturar presas.
- Las picaduras de medusa provocan un dolor intenso y punzante que irrita la piel y genera una herida que puede durar días e incluso meses. En casos más graves pueden aparecer temblores, fiebre, vómitos, calambres, etc.
Qué hacer ante una picadura de medusa. El tratamiento en caso de recibir una picadura de medusa busca atenuar los efectos del veneno y extraer los restos que pueden haber quedado en la piel. Para ello, se aconseja avisar al socorrista más cercano y seguir las siguientes recomendaciones:
- Limpiar la zona afectada. En primer lugar, se recomienda lavar la zona de la piel afectada por la picadura de medusa con abundante agua salada o, en su defecto, suero salino y sin frotar la herida. El Ministerio de Sanidad explica que “nunca” se debe utilizar agua dulce ya que, por sus propiedades, puede provocar una mayor difusión del veneno.
- Quitar los restos de tentáculos o fragmentos de medusa. Si hay restos adheridos a la piel, estos se deben eliminar cuidadosamente utilizando unas pinzas o cualquier mecanismo similar. No tocar la picadura directamente con las manos.
- Aplicar frío sobre la herida. Una vez seguidos los primeros pasos, se puede aplicar frío durante unos 15 minutos sobre la picadura de medusa usando una bolsa de plástico que contenga hielo, para evitar la inflamación y reducir el dolor. También se recomienda aplicar una solución de bicarbonato al 50% y desinfectar la herida con alcohol yodado dos o tres veces al día durante 48 a 72 horas.
- Casos graves. Si el dolor es muy intenso o el estado de la persona empeora progresivamente se recomienda acudir a un centro médico.
Fuentes
Ministerio de Sanidad
Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico
Instituto de las Ciencias del Mar