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Rusia es uno de los países que más está desarrollando su industria del turismo de esquí. Desde el cierre de las rutas aéreas directas a Europa,la gran mayoría de aficionados se está quedando en casa. Esto está provocando la construcción de muchas nuevas estaciones por todos sus territorios, mientras otros complejos invernales amplían su número de pistas.
El mercado actual en Rusia es enorme, y se calcula en los próximos cinco años se necesitarán más de medio centenar de telecabinas, miles de aparatos de nieve artificial, e innumerables máquinas pisapistas. Un mercado al que las empresas europeas no pueden acceder por el veto de los Estados Unidos y de la Unión Europea.
Ante este panorama, varias empresas nacionales se han lanzado a desarrollar sus propios remontes, al tiempo que marcas c...'
