Kiev. El ejército ucraniano afirmó este lunes que bombardeó anoche “la mayor” terminal petrolera de Crimea, península ucraniana anexada por Moscú en 2014, y que un misil ruso alcanzó un buque civil en el puerto de Odesa, dejando un muerto, según Kiev.
Desde hace un año, Ucrania atraviesa dificultades en su frente este, donde las fuerzas rusas avanzan hacia Pokrovsk, una ciudad clave para la logística de las fuerzas armadas ucranianas.
Las tropas de Moscú siguen arrebatándole terreno a Kiev casi a diario, frente a unos ucranianos peor armados y en menor número.
“Gracias a la acción decidida de las unidades del grupo Centro, el pueblo de Grodivka fue liberado”, reivindicó este lunes el Ministerio ruso de Defensa.
Esta localidad se encuentra a una decena de kilómetros al este de Pokrovsk, un importante nudo que conecta varias fortalezas ucranianas del Donbás, la región del este del país, eminentemente industrial.
El ejército ucraniano afirmó este lunes que bombardeó la terminal petrolera de Feodosia, en el este de Crimea, “la mayor” de la península anexada, que abastece principalmente al ejército ruso, según Kiev.
Las autoridades rusas reportaron un importante incendio en la terminal, sin mencionar el ataque ucraniano, y aseguraron que no hubo víctimas. En unos videos publicados en línea se aprecian, al menos, dos oscuras humaredas emanando del lugar.
Por la noche, Rusia golpeó el puerto de Odesa, en el sur de Ucrania, y alcanzó un buque civil con bandera de Palaos, un archipiélago del océano Pacífico, según el gobernador regional, Oleg Kiper.
Un ucraniano de 60 años, empleado de una sociedad privada de manutención, murió. “Otros cinco ciudadanos extranjeros resultaron heridos”, detalló en Telegram.
El puerto de Odesa, uno de los principales puntos de salida del grano ucraniano, ha sido blanco de ataques del ejército ruso en varias ocasiones.
Ucrania, a su vez, ha intensificado este año sus ataques contra territorio ruso, dirigidos a sitios energéticos que, a su juicio, alimentan al aparato militar ruso, así como a poblados fronterizos.
Rusia lanzó una ofensiva en Ucrania en febrero de 2022 y actualmente ocupa alrededor del 20% del país.
“Las fuerzas de defensa realizaron esta noche un exitoso ataque contra una terminal petrolífera marítima del enemigo, lo que desencadenó un incendio”, afirmó el Estado Mayor del ejército ucraniano en las redes sociales.
El ataque contra la terminal, “la mayor de Crimea en cuanto a volumen de productos petrolíferos procesados”, se llevó a cabo con “misiles”, precisó el ejército.
Las autoridades rusas de ocupación indicaron que “una parte” de la ciudad se quedó sin electricidad y que se suspendió la circulación de trenes de cercanías.
Algunos expertos ucranianos apuntan que Rusia podría intensificar sus bombardeos contra infraestructuras civiles, sobre todo energéticas, en las próximas semanas, de cara al invierno boreal y a las presidenciales estadounidenses de noviembre.
Por otro lado, por la noche, dos hermanos murieron en la región fronteriza de Sumi, en el noreste de Ucrania, y una mujer de 61 años perdió la vida en otro ataque en Jersón, en el sur del país, anunciaron las autoridades ucranianas.
El dirigente del municipio de Jersón afirmó que otro bombardeo, realizado más tarde, dejó una veintena de heridos.
En Sloviansk, en el este, un bombardeo ruso mató a una persona e hirió a otras siete, según las autoridades.
El ejército ruso también lanzó, la madrugada de este lunes, un nuevo ataque contra Kiev, la capital ucraniana, con drones explosivos y dos misiles balísticos, indicaron las autoridades municipales.
Los proyectiles fueron derribados por la defensa aérea, sin dejar víctimas, aseguraron las autoridades.
Además, un tercer misil impactó en una zona “próxima” a la base aérea de Starokostiantiniv, en la región de Khmelnitski, en el oeste.
Esta base está situada a unos centenares de kilómetros de la línea del frente y suele ser blanco de ataques rusos.
En otro frente, el de la guerra digital, el grupo ruso VGTRK, difusor de las cadenas de televisión públicas de Rusia y de los eventos del Kremlin, afirmó que había sido blanco de un ciberataque “sin precedentes”, reivindicado por Kiev.
Según VGTRK, el ataque informático tuvo resultados limitados. “Todo funciona con normalidad, no hay ninguna amenaza significativa”, aseguró el grupo.