México. Cientos de manifestantes invadieron este martes la sede del Senado mexicano, obligando a suspender la sesión en la que se discutía una polémica reforma impulsada por el mandatario Andrés Manuel López Obrador, la cual plantea la elección popular de jueces. Así lo anunció el presidente de la cámara.
Tras permanecer varias horas en los alrededores del edificio legislativo en rechazo al proyecto, los manifestantes traspasaron repentinamente las barreras de seguridad e irrumpieron en la sala donde deliberaba el pleno.
“Decreto receso indefinido, se levanta la sesión”, dijo poco después Gerardo Fernández Noroña, jefe del Senado, controlado por el oficialismo de izquierda.
En el lugar había escasa presencia policial, por lo que los detractores de la iniciativa ingresaron sin mayores obstáculos y permanecían dentro del edificio.
Entre esas personas se hallaban funcionarios judiciales en huelga y estudiantes universitarios, que coreaban cánticos como “¡señor senador, detén al dictador!” o “¡el poder judicial no va a caer!”, agitando una enorme bandera de México.
Los manifestantes ingresaron inicialmente a una explanada dentro del recinto y luego entraron a la sala donde ocurría el debate.
“Vuelvo a pedirles a los senadores que se calmen”, dijo Fernández Noroña tras enterarse de que los manifestantes habían ingresado al edificio.
Tras los incidentes ocurridos, el Senado convocó a una sesión en una sede alternativa para debatir la reforma judicial.
Fernández Noroña dijo que ordenó que se “convoque a la reanudación de la sesión” la noche de este mismo martes en la antigua sede de esa cámara en Ciudad de México.
“Habrá reforma al poder judicial”, señaló el jefe del Senado en la red social X, controlado por el oficialismo de izquierda.