Crítica. Esa es la palabra que utiliza Roberto Thompson, alcalde de Alajuela, para calificar la situación que enfrenta su municipio al revisar las cifras de homicidios, robo de vehículos y asaltos. El político, de cuna liberacionista, sostiene que la inseguridad se acentuó en el cantón en comparación con su anterior gestión, en el periodo 2011-2018.
En el cantón central hay, en promedio, un homicidio cada 10 días, se roban un carro cada 10 horas y asaltan a un peatón cada 9 horas.
Aunque la provincia, en general, tiene una tasa de homicidios mucho más baja que la nacional, Thompson, sostiene que en los primeros cuatro meses de este nuevo mandato ha percibido la necesidad de un cambio de rumbo urgente que permita recuperar el cantón para sus habitantes y quienes lo visitan a diario. Uno de esos cambios urgentes tiene que ver con la vigilancia.
Alajuela tiene un contrato de vigilancia con cámaras y monitoreo, firmado hace tres años y medio, que vencerá en 2025. El sistema cuenta con 200 cámaras en sitios estratégicos, pero, según el alcalde, no ofrece las condiciones adecuadas para un funcionamiento óptimo. Señaló que el monitoreo se realiza únicamente de 7 a. m. a 4 p. m., lo que implica que no funciona durante las noches ni los fines de semana, a pesar de que la inversión asciende a ¢1.800 millones.
La idea es replantear la vigilancia para que opere las 24 horas del día, los siete días de la semana, y ubicar el centro de monitoreo en el futuro edificio de la Policía Municipal, que se espera esté listo a fin de año. Además, se pretende instalar más cámaras en lugares sensibles que actualmente no cuentan con ellas, así como incorporar drones y capacitar a la policía en su uso, prometió el jerarca.
Con este nuevo centro de monitoreo, se podrá coordinar mejor con la Fuerza Pública y el OIJ para ofrecer una respuesta inmediata al problema delincuencial y tratar de recuperar la seguridad que se tenía años atrás.
El alcalde espera que, para fin de año, haya 20 oficiales adicionales en la Policía Municipal, que actualmente cuenta con 28 y con 25 promotores de seguridad, sumando un total de 43 agentes. Sin embargo, el funcionario considera que este número es insuficiente, dado que se deben cubrir los distintos turnos de trabajo en un cantón con más de 322.000 habitantes, distribuidos en 388,4 km².
Añadió que la policía municipal carecía de un director, por lo que ya se nombró uno a través de la recalificación de la plaza, y se planteó al Concejo Municipal la meta de llegar a 100 policías municipales en el futuro. Este cuerpo de vigilancia tendrá su propio local ya que, con un presupuesto cercano a los ¢300 millones, se está rehabilitando un edificio cuya remodelación fue aprobada recientemente.
Una parte considerable de los 26 homicidios en ese cantón se atribuyen al tráfico de drogas en zonas marginadas como los barrios San José y Desamparados de Alajuela, así como Copán de Montecillos. Por ello, una de las metas es recuperar los espacios públicos e iluminar las áreas problemáticas.
Otro de los problemas que el municipio necesita atender con urgencia es la proliferación de habitantes de calle, ya que muchos de ellos cometen hurtos, robos y asaltos para sobrevivir, y algunos lo hacen para mantener sus adicciones. Además de estos delitos menores, muchos piden ayuda en las calles, lo que genera una mayor sensación de inseguridad, según indicó Thompson. Al parecer, gran parte de estas personas provienen de otras regiones y generan problemas recurrentes a los vecinos.
Para contrarrestar esta situación, la vicealcaldesa, Sofía González, impulsa un proyecto de albergue, cuyo financiamiento fue aprobado en un presupuesto extraordinario. La idea es ponerlo en funcionamiento pronto para atender y tratar de rehabilitar a hombres y mujeres que deambulan por las calles, parques y otros espacios públicos.
La provincia de Alajuela ocupa el segundo lugar en robos de vehículos, solo superada por San José. El cantón de Alajuela registró 550 sustracciones el año pasado, casi la mitad de los 1.189 robos en toda la provincia. En lo que va del año, la tendencia continúa, ya que de los 706 casos provinciales, 308 se han registrado en el cantón de Alajuela, el de mayor incidencia de todo el país en este tipo de delito.
Al referirse a esta situación, el alcalde expresó que, con el fortalecimiento de la Policía Municipal y los instrumentos tecnológicos adecuados, se espera identificar y desarticular las bandas dedicadas a este delito. También destacó la necesidad de contar con el apoyo ciudadano a través de barrios organizados que faciliten una mejor respuesta policial.
Agregó que en ese cantón se reúne una vez por semana la mesa operativa de coordinación con otros entes policiales como Migración, Tránsito, Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y Fuerza Pública, quienes coordinan operativos con la Policía Municipal. La semana pasada llevaron a cabo un operativo en bares y sitios donde se decomisaron armas, drogas y se clausuraron locales sin patentes o con menores de edad en su interior. La idea es realizar operativos similares cada 15 días.
Con la embajada de Estados Unidos se está trabajando en el proyecto “Sembremos Seguridad”. Esta embajada proporcionará todo el equipamiento para el nuevo edificio de la Policía Municipal y permitirá que el centro de monitoreo tenga un carácter regional, beneficiando a otros cantones de la provincia que estarán interconectados en este esfuerzo.
El Ministerio de Justicia va a construir un Centro Cívico para la Paz en Santa Rita, frente a El Infiernillo. Se invertirán más de ¢4.000 millones en un espacio destinado a fomentar la cultura, el arte y el deporte, de manera que la juventud y las familias tengan esparcimiento en una zona afectada por la delincuencia y las drogas.