La Administración de Resolución de Coopeservidores, encabezada por Marco Hernández, descartó la propuesta de los inversionistas de que el Banco Popular absorba una mayor parte de la cartera de crédito asumida con el “banco bueno” de la cooperativa.
En una reunión realizada este viernes, Hernández confirmó a dos representantes de los inversionistas que la propuesta no es viable, ya que el Banco Popular manifestó que no tiene interés ni apetito por administrar la cartera crediticia restante.
Según un comunicado de prensa compartido este viernes, la propuesta de los ahorrantes consistía en la creación de un fideicomiso administrado por el Popular con los activos del “banco bueno” que la entidad no haya absorbido y que no se logren colocar en negociaciones con otras instituciones.
El propósito de la iniciativa era evitar que dichos activos pasaran al fideicomiso del “banco malo”, compuesto por la cartera de crédito y bienes menos atractivos de la cooperativa, así como por los activos que no absorbiera el Popular.
Hernández también explicó a los inversionistas que todos los depositantes, tanto físicos como jurídicos, con ahorros de hasta ¢6 millones tienen garantizado el pago en su totalidad.
Agregó que la prelación de pagos de esos pasivos se reconocerá para los depósitos a la vista y los certificados vencidos inmediatamente, mientras que los depósitos a plazo se cancelarán de acuerdo con su término.
Los inversionistas también expresaron la inquietud sobre por qué no se utilizó el fondo de garantía de depósitos. Al respecto, la Administración manifestó que el mecanismo solo puede activarse si la entidad intervenida, declarada inviable, se somete a un proceso concursal sin resolución.
Otra posibilidad sería usar el fondo para apoyar el proceso de resolución y hacerlo viable, cubriendo la diferencia entre el valor de los activos de la entidad y los depósitos garantizados.
No obstante, Hernández aseguró que, en este caso, hay suficientes activos para cubrir a los ahorrantes con la absorción de un gran porcentaje del “banco bueno” por parte del Banco Popular.
De igual manera, los representantes de los ahorrantes solicitaron información sobre la cartera de crédito de Coopeservidores que el Banco Popular no absorbió en el “banco bueno”.
En ese sentido, el resolutor indicó que la porción de cartera de crédito no adquirida por el Popular asciende a ¢264.000 millones al 31 de julio. Además, quedaron propiedades, vehículos, mobiliario, equipo y otros activos, cuyo valor se estima en ¢6.000 millones.
El miércoles anterior, la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) se comprometió a atender cuatro solicitudes específicas de información planteadas por los dirigentes de los inversionistas, quienes realizaron una manifestación frente al edificio del órgano supervisor.
En el encuentro de esta tarde participaron Hernández y la superintendenta general de entidades financieras, Rocío Aguilar. Luis Marín, Antonio Barzuna y Roberto Sánchez asistieron en representación de los inversionistas.
Es la segunda ocasión en que Hernández se reúne con el grupo de representantes. La reunión finalizó con el acuerdo de mantener informados a los inversionistas y ahorrantes sobre los avances del proceso de resolución.
