El presupuesto ordinario de 13 ministerios del gobierno experimentará una reducción el próximo año. En contraste, ocho títulos presupuestarios recibirán un incremento en sus asignaciones. Esta información se desprende de la propuesta del plan de gastos presentada este viernes por el Ministerio de Hacienda a la Asamblea Legislativa dentro del Presupuesto Nacional de 2025.
Nogui Acosta no acatará el FEES que fijen los diputados si el monto no le parece razonable
El Ministerio de Educación Pública tendrá una reducción de ¢18.000 millones. Los ¢2,58 billones planteados para este año representan el 4,9% del PIB, el más bajo registrado, un poco más de la mitad del 8% fijado por la Constitución.
La justificación del presupuesto asegura que el año anterior se incluyeron aproximadamente ¢45.000 millones para atender el pago retroactivo del aumento salarial correspondiente al periodo 2020-2023, monto que no se repetirá en el siguiente ejercicio presupuestario del 2025.
Otras reducciones relevantes se registran en los ministerios de Obras Públicas y Transportes (MOPT) y Cultura y Juventud. El primero decrece un 3,7%, igual a ¢16.000 millones, y el segundo, un 5,9%, cerca de ¢3.000 millones.
El recorte en el MOPT obedece principalmente a que, de los ¢19.930,9 millones aprobados por los diputados a esa cartera vía mociones de ajustes en el presupuesto de este año, financiados con rebajos del pago de intereses del servicio de la deuda, solamente se le asigna el monto de ¢9.750 millones.
En Cultura, el recorte se debe, en parte, a la reducción en la adquisición de bienes y servicios, principalmente en las subpartidas de servicios de gestión y apoyo, alquileres de equipo y maquinaria, impresión, actividades protocolarias, entre otras.
Esto toma en cuenta que para el año 2025 se realizará el Festival Nacional de las Artes, mientras que en el 2024, el festival es internacional, requiriendo menos recursos para las actividades.
Además, hay una caída en el monto de las transferencias al Sistema Nacional de Radio y Televisión (Sinart) en remuneraciones, debido a que para este año su presupuesto se elevó para afrontar su reestructuración.
Los presupuestos de los ministerios de Trabajo y Vivienda tienen variaciones atípicas.
Mientras el primero baja, el segundo sube en ¢151.782 millones porque, en adelante, desde Vivienda se hará la transferencia correspondiente al Banco Hipotecario de la Vivienda (Banhvi), la cual antes se presupuestaba en Trabajo.
El objetivo del cambio es reflejar de manera adecuada el gasto según su función, añade el texto. De ese incremento, ¢150.598 millones provienen del Fondo de Desarrollo Social y Asignaciones Familiares (Fodesaf).
En términos generales, el plan de gastos del próximo año disminuirá en un 1,9% con relación al periodo anterior, equivalentes a ¢244.000 millones. El monto total de egresos pasa ¢12,64 billones del año pasado a ¢12,39 billones.
Esta caída se debe principalmente a la reducción en el servicio de la deuda pública, que tendrá una disminución absoluta de ¢277.023,3 millones, resultado de la rebaja en el pago de amortizaciones de ¢339.430 millones y el aumento en el pago de intereses en ¢63.369 millones.
En contraste, las carteras de Salud y Seguridad Pública, así como el Poder Judicial, registran los mayores aumentos después del Mivah. Salud recibiría ¢23.900 millones adicionales (6,6%), Seguridad ¢10.400 millones (3,4%) y el Poder Judicial ¢13.600 millones (2,7%).
El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) recibiría ¢4.400 millones adicionales (7,9%), básicamente para el financiamiento a los partidos políticos y gastos electorales.
En Salud, el incremento lo impulsa principalmente el aumento en remuneraciones (¢17.245 millones) por el pago del salario global, y en la adquisición de bienes y servicios que estarán a cargo de la Dirección Nacional del Cen-Cinái de manera centralizada.
En el Poder Judicial y Seguridad, los aumentos obedecen principalmente al incremento de plazas para atender la inseguridad y a destinos específicos provenientes de la Ley de Impuesto a las Personas Jurídicas. En el caso de Seguridad, se registra, además, un incremento en el salario a los policías.
Además, en el título Obras específicas, que en presupuestos anteriores no contaba con financiamiento, se asignan ¢2.500 millones, específicamente para habilitar contenido presupuestario para proyectos de inversión o programas de interés social en el nivel local, comunal o regional.
Otros tres títulos presupuestarios mantendrán su asignación nominal. Estos son la Asamblea Legislativa, la Contraloría General de la República (CGR) y la Defensoría de los Habitantes, sin que el texto lo justifique. Nogui Acosta, ministro de Hacienda, aseguró que ejecución de estas tres instituciones “no amerita que crezca el presupuesto”.