El 90 % de la población cuenta con agua potable, pero aún existen grandes brechas. La falta de inversiones en infraestructura afecta, desde hace muchos años, la calidad y la cantidad del suministro, principalmente en el área metropolitana (Hatillos, Mata Redonda, Coronado, Desamparados y Alajuelita, entre otros).
Todo sistema de abastecimiento consta de una fuente de producción (río, naciente, pozo), obras para la captación de esa fuente, tuberías para la conducción, infraestructura para el tratamiento (una planta o simplemente desinfección), tanque de almacenamiento, tuberías para la distribución entre la población (incluidos los hidrantes).
Esa infraestructura requiere mantenimiento, pero con el paso del tiempo se vuelve insuficiente para atender el crecimiento de las comunidades. Por tanto, el administrador debe planificar con mucho tiempo de anticipación la incorporación de nuevas fuentes de producción para satisfacer la demanda, así como las obras para asegurar la potabilidad, almacenamiento y distribución.
Previamente, deben realizar estudios básicos, identificar y comprar los terrenos y servidumbres, hacer los diseños (hidráulicos, estructurales, arquitectónicos, eléctricos, mecánicos) y los planos, calcular el costo de las obras, determinar las especificaciones técnicas de los materiales y los términos de referencia.
Estas tareas, dependiendo de la complejidad del proyecto, toman varios años y precisan la participación de un equipo de ingenieros civiles, estructurales, eléctricos, mecánicos, etc. También arquitectos, dibujantes, presupuestistas, abogados, hidrogeólogos, gestores ambientales y los laboratorios de materiales y de agua.
Se requieren permisos de varias instituciones y municipalidades. Después de la etapa de diseño, continúa la de financiamiento. Posteriormente, la elaboración del cartel y finalmente la ejecución.
Juan Manuel Quesada, presidente de Acueductos y Alcantarillados (AyA), afirma que va a fortalecer la gestión y desarrollar proyectos de inversión en agua potable. Dice que lo hará con 41 proyectos y la gestión de cerca de 70 licitaciones de aquí al 2026. Ofrece integrar 30 nuevas fuentes de agua (200 millones de litros al día), tanques de almacenamiento (47 millones de litros) y colocar tuberías (619 kilómetros).
Es un gran reto para el AyA. Le recomiendo hablar con la verdad, sobre todo a aquellas familias que sufren los racionamientos. Elimine las palabras “de forma acelerada” de su discurso, de tal manera que se lea que va a fortalecer la gestión del AyA y desarrollar proyectos de inversión en agua potable. Lo importante es realizar todas las actividades de manera planificada y coordinada en el tiempo, aun cuando usted ya no sea presidente ejecutivo.
¿Cuenta el AyA con personal suficiente, capacitado y experimentado para llevar a cabo 70 licitaciones o supervisar a los concesionarios de los 41 proyectos? ¿Cómo convencer a los costarricenses de que lo que promete no está escrito en una servilleta? ¿En qué estado se encuentra cada uno de los 41 proyectos y los cerca de 70 carteles de licitación? ¿Cumplen los proyectos con los requisitos para una licitación, incluidos los recursos económicos?
Quesada achaca la crisis del AyA a administraciones anteriores y a los muchos años de mal manejo del ente rector. Coincido en que varios presidentes ejecutivos carecieron del mínimo de conocimiento sobre el quehacer institucional e incorporaron personal de confianza también sin los atestados pertinentes.
El AyA nunca ha sido la institución por la que se pelean para presidir cada cuatro años, y por esa razón, los seleccionados nunca atendieron los planes de inversión. Por el contrario, se dedicaron a obstruir lo planificado, o bien a modificarlo, agravando así el rezago en infraestructura que cada año se va acumulando, engavetando y desactualizando.
Quesada desconoce al AyA, y probablemente sea otro presidente ejecutivo que, cuando ya casi consigue entender la institución, finalice su nombramiento. Eso, si lo dejan terminar en el 2026.
dagoberto.arayavillalobos@gmail.com
El autor es ingeniero civil y fue director de diseño de la Unidad Estratégica de Negocios del AyA.