Jeyland Mitchell fue la sensación de la Selección de Costa Rica en la última Copa América. El zaguero pasó, gracias a sus actuaciones, de Alajuelense de la Primera División de Costa Rica al Feyenoord de Países Bajos.
Sin embargo, lo que todo futbolero tico desea todavía no se ha dado: Jeyland no ha debutado con su nueva institución.
¿Qué pasa con Mitchell? Para encontrar la respuesta a esta pregunta, La Nación consultó a tres entrenadores costarricenses con amplia experiencia internacional, que también han visto cómo trabajan los clubes de élite mundial como el Feyenoord, debido a que han asistido a pasantías en el Viejo Continente.
Carlos Watson, experto formador de talentos, explicó que el jugador nacional debe comprender que la gran deficiencia a combatir es el ritmo de partido.
“Tiene las condiciones para ir allí, lo que pasa es que, para mí, en términos generales, nosotros estamos en una marcha y ellos en otra. Es la alta exigencia lo que se vive allá”, dijo.
“Esa marcha de más que nos llevan tiene que ver con la reducción de espacio a la hora de jugar. Al reducirse el espacio, falta tiempo y decisión. El espacio está, el tiempo también, pero usted no tiene la velocidad, entonces necesita adquirirla, y eso tiene que ver con otros aspectos como técnica, percepción y lectura del juego”, acotó.
Rónald González, entrenador de Costa Rica en el Mundial Sub-20 de Egipto 2009, puntualizó que con Jeyland el proceso es muy probable que sea lento, ya que vivió una transferencia particular. De esta forma, la preparación que le están haciendo lleva más tiempo.
“Normalmente, cuando hay una transferencia como la de Jeyland, que es un jugador que ni siquiera acá estaba consolidado, porque solo llevaba seis meses jugando en Alajuelense, los jugadores deben adaptarse a la cultura, a la forma de juego, a la alimentación, al idioma”, dijo.
González indicó que, por el puesto que juega Mitchell, él cree que su consolidación en Europa, en un escenario ideal, puede durar de seis a ocho meses.
“A él le están trabajando fuertemente el aspecto físico, el conocimiento del sistema y la idea del entrenador. En cancha, los equipos allá exigen que maneje el hombre a hombre y el ataque al espacio”, contó González.
Un costarricense que sabe cómo se maneja la llegada de talentos en el Feyenoord es Douglas Sequeira. El exfutbolista firmó con este club en 1996 por cinco temporadas, aunque solo estuvo dos años.
“Feyenoord es un equipo que va a jugar Champions. Siempre se tiene que pasar por el proceso de cambio de cultura de entrenamiento, pero las condiciones de Jeyland son incuestionables. El cambio es fuerte, porque llegará a unos entrenamientos más intensos, cortos, rápidos; hay trabajo de fuerza, presión tras pérdida... Todo eso él lo tendrá que sentir”, detalló.
Jeyland Mitchell: De su increíble historia aún faltaba algo por contar
De hecho, Douglas en su momento se cansó de esperar una oportunidad y prefirió rescindir su contrato.
“En el alto nivel, la intensidad cambia. Uno puede entender que se entrena menos tiempo, pero con mucha fuerza y velocidad. El futbolista tico tiene capacidad, pero jugar en Europa es muy complicado”, acotó.
Sequeira mencionó que en este mes, el jugador está probando su potencia, fuerza y velocidad, además de su capacidad interpersonal para abrir canales de comunicación.
Carlos Watson coincidió en que estos equipos concentran su desarrollo en la capacidad tanto mental como física para decidir bajo una presión muy diferente a la del fútbol tico.
La gran preocupación que afronta ahora Mitchell, según los expertos, es que, al venir a la Selección para la Liga de Naciones, esta situación no implique un atraso en el proceso que está llevando, para así verlo pronto en la liga tulipán.
“Él va a perder mucho de lo que ha avanzado, por lo que debe ser paciente. Por su posición, yo creo que pueden pasar de seis a ocho meses para verlo consolidado”, finalizó Rónald González.