El nuevo Hospital Monseñor Sanabria que comenzaría a funcionar en el tercer trimestre del año, usará solo cinco de sus 14 quirófanos y apenas siete de sus 24 camas para cuidado intensivo de pacientes.
El sindicato más grande de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), la Unión Nacional de Empleados de la Caja (Undeca), denunció que el nuevo hospital de Puntarenas iniciará labores sin el personal suficiente para atender las necesidades crecientes de la población porteña.
Carlos Báez Sossa, vocero de Undeca, denunció que la Caja no dice que las nuevas instalaciones mantendrán prácticamente los mismos servicios del viejo hospital, con el agravante de la falta de personal.
El nuevo hospital tampoco ofrecerá el servicio de hemodinamia para las personas con problemas del corazón.
Así está quedando el nuevo hospital de Puntarenas
La Nación envió una consulta a la CCSS pidiendo una reacción ante la denuncia de Undeca. La institución no había enviado respuesta al cierre de esta nota.
A finales de junio, la Caja anunció que el personal del Hospital Monseñor Sanabria, se alistaba para el traslado al nuevo edificio, localizado en Barranca, en el tercer trimestre de este año. En diciembre del 2023, las autoridades habían informado de que el nuevo hospital estaría para el primer semestre del 2024.
La promesa es que los cinco pisos del inmueble tengan una sala de cuidado intensivo, además de doce salas de operaciones en el bloque quirúrgico, así como un quirófano en Emergencias y otro en el área de Obstetricia.
Cada quirófano incluirá dos salas integradas con sistemas audiovisuales que permitirán el aprendizaje en la formación de nuevos profesionales, además de telemedicina.
La obra se estimó inicialmente en $225 millones, pero ascendió a $234,5 millones. Los $9,5 millones de más se deben a omisiones en la construcción y equipamiento de la lavandería.
Los movimientos de tierra comenzaron en setiembre de 2021 luego de tres gobiernos y más de nueve años después del terremoto de Nicoya, que dañó la estructura del viejo centro médico. La tragedia natural destruyó la torre de siete pisos del edificio, en setiembre de 2012.
En el 2018, Randall Álvarez Juárez, director médico, manifestó que las nuevas instalaciones estarán diseñadas para atender una demanda proyectada al 2030 de 316.624 habitantes.
