París. Durante los Juegos Olímpicos en París, los medios de comunicación y las plataformas sociales francesas se sacudieron por una razón adicional. El beso entre la ministra de Deportes de Francia, Amélie Oudéa-Castéra, y el presidente Emmanuel Macron generó un gran debate, con muchos calificándolo de “apasionado” y “inusual”.
La escena se situó en la ceremonia de apertura de París 2024, que tuvo lugar el pasado viernes, y desató una variedad de reacciones en las redes sociales.
En la imagen, se puede observar a Oudéa-Castéra abrazando al presidente justo al finalizar la ceremonia, que había mantenido en vilo a toda Francia durante meses, y dándole un beso en el cuello, cerca de la oreja derecha, mientras le sostiene con firmeza el brazo derecho. Frente a esta escena, el primer ministro Gabriel Attal parece evitar mirar.
La publicación francesa Midi Libre describió el abrazo como una “explosión de alegría” por parte de Oudéa-Castéra y el presidente. “El beso generó un gran revuelo”, informaron.
En Madame Figaro no dudaron en calificar el gesto de la imagen como “inusual”, añadiendo que Oudéa-Castéra “definitivamente sabe cómo atraer la atención”. Estas palabras llegan después de varias semanas en las que la política ha sido el centro de atención, con la organización de los primeros Juegos Olímpicos en Francia en un siglo.
Oudéa-Castéra ya había generado comentarios sarcásticos en las plataformas sociales después de lanzarse al río Sena antes que la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, para demostrar la pureza del agua.
Las imágenes la capturaron con una especie de traje completo de neopreno y una gorra ajustada sobre el cabello. Al acercarse al borde del muelle del Sena para sumergirse, la ministra resbaló de manera torpe ante las cámaras, pero no desistió de sumergirse y ser grabada mientras nadaba algunos metros en estilo libre en el río.
En las redes sociales, muchos mencionaron los matrimonios del presidente y la ministra. El líder francés tiene una relación de muchos años con Brigitte Macron, su esposa desde 2007. Por otro lado, Oudéa-Castéra está unida en matrimonio con el ejecutivo financiero Frédéric Oudéa, con quien se casó en 2006.