Nueva York. Los precios del petróleo siguieron cayendo el lunes, hasta su nivel más bajo en más de un mes, ignorando la nueva tensión geopolítica en Medio Oriente.
El precio del barril de crudo Brent del mar del Norte para entrega en setiembre se contrajo un 0,27% y cerró a $82,40. El West Texas Intermediate (WTI) estadounidense para entrega en agosto, último día de cotización, bajó un 0,43% hasta $79,78. Es la primera vez desde mediados de junio que el WTI termina por debajo de la barrera de los $80.
El oro negro no reaccionó a la escalada entre Israel y los rebeldes hutíes de Yemen. Después de que un ataque con drones sobre Tel Aviv, reivindicado por los hutíesa , matara a una persona el viernes, Israel tomó represalias con ataques que alcanzaron el sábado una central eléctrica y depósitos de combustible en el puerto de Hodeida.
Además, en la región rusa de Krasnodar, la refinería de Touapsé fue blanco de varios drones que provocaron un incendio. Cerca del 90% de la producción de este centro, que pertenece al grupo ruso Rosneft, se destina a la exportación, declaró a la AFP una fuente de los servicios de defensa ucranianos.
A pesar de estos acontecimientos, los precios no han subido, observó Bart Melek, de TD Securities, ya que “el mercado está más preocupado por un exceso de oferta”.
La opinión cada vez más extendida, añadió el analista, “es que en ausencia de una recuperación real en China y con una marcada ralentización de la economía estadounidense, existe el riesgo de que tengamos más petróleo del que necesitamos”. “Así que muchos de los que estaban jugando al alza se están echando atrás”, según Melek.
Los analistas de TD Securites ven que el precio del WTI seguirá bajando hasta situarse en torno a $78 por barril. Para Matt Britzman, de Hargreaves Lansdown, no obstante, es poco probable que los precios del crudo se desplomen, apoyados por la perspectiva de nuevos recortes de las tasas de interés por parte del banco central estadounidense (FED).