Era la noche para que las estrellas de Estados Unidos se lucieran y tuvieran su gran despedida antes de los Juegos Olímpicos de París 2024. Sin embargo, quien realmente deslumbró fue Noelia Bermúdez. La portera de la Selección de Costa Rica Femenina lo tapó todo y fue en gran medida la responsable del histórico 0-0 en el fogueo.
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— TD Más (@tdmas_cr) July 17, 2024
Con sus manos, sus piernas y su cuerpo en los achiques, frustró a cuanta jugadora estadounidense se acercó a su arco. Bermúdez terminó con 12 paradas y montó un show digno de aplausos en el Audi Field de Washington.
Su actuación fue en un escenario con casi 20.000 personas y frente a una de las gigantes del fútbol. Con humildad y tal vez sin dimensionar que secó a un plantel que ha ganado títulos mundiales y medallas olímpicas, prefirió destacar el trabajo grupal.
“Siento mucho orgullo por el trabajo, el desgaste y el sacrificio en la cancha, porque se da hasta más de lo que el cuerpo puede. Fuimos muy realistas desde el inicio, sabíamos al rival que nos enfrentamos y que a este rival no se le puede jugar de tú a tú. Sin embargo, teníamos claro el juego que podíamos hacer y salió a la perfección”, dijo en declaraciones a la Fedefútbol.
Noelia vive una especie de revancha, luego de quedarse fuera del Mundial de Australia y Nueva Zelanda. La guardameta recuperó la ilusión por la Selección y de nuevo está en competencia por un puesto.
El gran responsable de tener de nuevo una sonrisa en la Tricolor es el técnico Beni Rubido, quien le ha permitido competir y ha implementado cambios en el grupo.
“Es un proceso que no es de esta semana, sino que desde que llegó el profesor Beni nos han inculcado aspectos tácticos nuevos y el equipo lo ha ido asimilando. Algunas veces hay semanas de frustración e incluso el día antes del juego había un poco de confusión. Sin embargo, todo se basa en cambiar el chip y darnos cuenta de que podemos competir contra las grandes”.
La guardameta espera llegar a la próxima eliminatoria mundialista y conseguir su objetivo de vivir la Copa del Mundo. Por ahora se ilusiona, no solo con su nivel, sino también con el recambio generacional y el nivel de las nuevas jugadoras.
“Les digo a las más jóvenes que se dejen ayudar de las que tenemos un poco más de experiencia. Ahora venimos con una camada de jugadoras que vienen empujando fuerte y que sin tener 20 años ya suman juegos con la Mayor. Esto es una ventaja para la eliminatoria, porque tendremos a figuras jóvenes con recorrido”.
