Gustavo Gamboa, quien no clasificó a la etapa final del concurso de imitaciones, conversó con ‘La Nación’ sobre su experiencia en este show de Teletica
Gustavo Gamboa quedó fuera de la fase final del programa Tu cara me suena. El comediante hizo un repaso con La Nación sobre su experiencia en el concurso de imitaciones, el cual fue un reto que asumió con total seriedad, pero sin dejar de lado su tono humorístico.
El ex participante de Dancing With The Stars (DWTS) confesó estar agradecido con el apoyo del público. Además, aseguró que más allá de las calificaciones trató de dar lo mejor de sí y explorar al máximo sus capacidades vocales y de actuación.
En alguna ocasión mi esposa me había dicho como ‘qué vacilón sería que vos estuvieras en Tu cara me suena, que es un programa de más humor‘. Tal vez no me imaginaba que me fueran a invitar porque ya había estado en un formato de concurso.
Es más exigente de lo que podía creer. Al final eso me sirve para afrontar los retos que se presentan en la vida y entrarle a las cosas, que es algo que siempre he hecho. Lo que me gusta de esto es que me deja la experiencia de haberlo vivido y no sé cuántas personas pueden decir eso.
Disfruté mucho Kiss, ya que a mí me gusta mucho el rock, creo que fue de las pocas imitaciones con las que me sentí identificado. Esa y la última que hice también, la de Pedro Fernández, fueron las dos con las que me sentí más cómodo. La que me fue más difícil, porque nunca le agarré el gusto, fue interpretar a Conchita Velasco.
Sí, pero sé en qué cosas ser competitivo. Yo desde un principio tenía claro a qué venía a este programa. Nunca visualicé ganar, sino el hecho de participar y entretener. Eso yo lo hablé con la producción y yo fui muy claro en eso, que yo no era cantante, pero el programa incluye esa otra parte de la comedia.
Desde la primera gala mi intención fue hacer lo mejor que podía, había cosas que claramente mi voz y mis capacidades no podían lograr, pero no me conformé con ser un chiste. Las presentaciones las hice tal cual, traté de calcar los movimientos de los artistas y la voz hasta donde podía llegar. Siempre me lo tomé seriamente.
Yo trabajé un tiempo en Pelando el ojo, no como comediante, y siempre lo vi muy chiva. Siempre supe que la gente que imita tiene un don muy especial, pues no es fácil. Yo puedo tratar de imitar voces, pero sé que no es mi gran fuerte y no es un tema solo de practicar.
La gran mayoría de la gente que ya me seguía se lo tomó bien. Sentí el apoyo de todos, independientemente de si veían el programa. Yo hacía resúmenes en mis redes, había gente que seguía el programa por eso que yo hice.
Me llevo el cariño de la gente, lo que sentía en la calle y lo que la gente me escribía en las redes. Salgo muy lleno de amor por lo que la gente me dice de la participación. Creo que Tu cara me suena permitió mostrarle a la gente otra faceta que no muestro en otros programas y eso conectó con el público.
No solo a otras figuras de la comedia, le recomendaría esto a cualquier persona. Atrévanse a hacer cosas que su mente y usted creen que no puede hacer. Al fin de cuentas la vida es muy cortita para limitarse a lo que la gente pueda decir.