Los incidentes provocados por los ultras del Anderlecht en Anoeta, además de ayudar al conjunto belga a remontar a la Real, se saldan ya, en las primeras horas, con cinco detenidos y unos cuantos identificados. Un grupo de radicales belgas rompieron la protección de seguridad de la grada visitante, arrancaron asientos y comenzaron a lanzar objetos a la afición realista ubicada justo debajo, incluso llegando uno de los asientos lanzados al césped.
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