Alex Pereira ha comenzado la semana de pelea como un tiro. El brasileño
regresa al octágono el próximo sábado para defender su cinturón ante Khalil Rountree, en una decisión que generó cierta división en la UFC y en el conglomerado de fanáticos de las artes marciales mixtas. El americano ha obtenido una oportunidad por el título
antes que Magomed Ankalaev, alguien que, para muchos,
puede ser la criptonita de la carrera de Poatan. Además, el nuevo retador regresa con la recompensa de una pelea titular
tras cinco meses de inhabilitación por un positivo en un test antidoping, un factor clave en este intercambio de palabras entre el monarca y el aspirante ruso.
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