A estas alturas ya no es un consejo original pero, si todavía no lo han hecho, deben ver algún partido de
Caitlin Clark. La nueva estrella de la
WNBA surgida de la Universidad de
Iowa está convirtiéndose en un fenómeno revolucionario en el basket estadounidense, por su capacidad para llenar pabellones y generar atención. Diría que también a escala global, por la forma en que lo ha logrado, antes y después de ser elegida número uno del último draft.
Seguir leyendo...