Mikel Oyarzabal ya está en casa tras sufrir otra decepción en forma de contratiempo físico. El capitán de la Real Sociedad y uno de los puntales de la selección española aterrizó esta tarde en el Aeropuerto de Hondarribia, sobre las 20:40 horas, tras volar en vuelo privado desde Belgrado, una vez abandonada la expedición española, que había puesto rumbo a Ginebra. Apoyado en una muleta se bajó del avión, salió del aeropuerto y montó en un taxi que le llevaba a casa.
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