El
Estadio Rajko Mitic, conocido popularmente como el
‘Pequeño Maracaná’, no fue el temible infierno de otras visitas de la selección española. En noviembre de 1977, la
Roja se impuso (0-1) a la extinta
Yugoslavia y se clasificó para el
Mundial de Argentina 78. Aquel encuentro pasó a la historia como
‘la batalla de Belgrado’ , que siempre será recordada por el célebre gol de
Rubén Cano y también por el botellazo a
Juan Gómez, ‘Juanito’.Seguir leyendo...