Seis años lleva la UEFA trabajando en el nuevo formato de la
Champions League que por fin se estrena este jueves, una vez completadas las eliminatorias previas, con el sorteo de la edición 2024-25, cuya final se jugará en
Múnich el sábado 31 de mayo de 2025. Será la culminación de la 70ª temporada de la gran competición europea de clubs y la 33ª desde que la antigua Copa de Europa pasó a llamarse Liga de Campeones de la UEFA. Y ahora será más liguilla que nunca, de 36 clubs aunque con matices: no se enfrentarán todos contra todos, serán ocho jornadas con cuatro partidos en casa y cuatro fuera ante ocho rivales distintos, sin la ida y vuelta tradicional. Los ocho primeros accederán directamente a los octavos de final, mientras que los clasificados entre el 9º y el 16º se enfrentarán con los clasificados del puesto 17 al 24 en una eliminatoria para acceder a los octavos. Quedarán fuera los 12 clasificados entre el puesto 25 y el 36. Vale la pena quedar lo más arriba posible no sólo por las ventajas deportivas, sino porque los premios económicos que dará la UEFA serán suculentos. Y clubs como el
FC Barcelona, con una situación económica en la que cada euro cuenta, pueden encontrar unos ingresos necesarios.
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