A los realzales no les ha dado ni tiempo para sentarse en su asiento de Anoeta después de un par de meses de descanso y un homenaje que ha resultado ser más corto de lo esperado. El Rayo Vallecano no solo ha pillado desprevenida a la Real, sino que también a su afición, que ha visto cómo los visitantes casi se adelantaban a los 20 segundos de partido tras una acción desafortunada de la zaga realista. Ha encendido el típico ‘runrun’, aunque no ha durado demasiado, ya que las gradas de Anoeta han empezado el encuentro con ganas de alentar a un equipo que se ve envuelto en una tormenta de verano ahora mismo. Sin embargo, algunos despistes defensivos y la poca precisión de los txuri urdin en los primeros instantes sí que sorprendían a los aficionados, acostumbrados a una Real que concede muy poco a los rivales.
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