Carolina Marín (31 años) se retiró de las semifinales del torneo olímpico después de lesionarse
la rodilla durante el segundo set cuando
dominaba el marcador 21-14 y 10-5. Marín se dobló la rodilla hacia adentro al devolver el volante y cayó al suelo gritando de dolor. Después de levantarse con mucho dolor, la onubense se quiso dar otra oportunidad y se puso una rodillera que llevaba preparada en su mochila. Su entrenador, Fernando Rivas trataba de consolarla sin saber todavía la magnitud de la lesión. Marín volvió a la pista, trató de jugar, pero en apenas un punto ya se dio cuenta que la gesta era imposible y se tiro de rodillas al suelo a llorar de forma desconsolada ante la angustia de todos los presentes en el estadio.
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