El gobierno de Andrés Manuel López Obrador concentra la búsqueda de los 43 normalistas de Ayotzinapa en cinco municipios aledaños adonde ocurrieron los hechos, así lo dieron a conocer padres de los jóvenes desaparecidos en 2014.
Detallaron que se trata de los municipios de Huitzuco, Cocula, Taxco, Iguala, así como Tepecoacuilco, donde en septiembre pasado comenzaron diligencias con maquinaria militar en el basurero y cuyos resultados se les darán a conocer en la próxima reunión con López Obrador el 9 de enero en Palacio Nacional.
“Nunca aceptamos que los 43 jóvenes hayan muerto en el basurero de Cocula”, aseveró Felipe de la Cruz, vocero de los padres de los normalistas desaparecidos, al cumplirse un mes más de la desaparición de los normalistas.
Por su parte, Vidulfo Rosales, abogado de los padres, abundó que una de las líneas de investigación que se han retomado con el gobierno de López Obrador es que los 43 normalistas fueron dispersados de Iguala, donde fueron levantados, y llevados en pequeños grupos a diferentes municipios.
Explicó que esto se desprende de los datos de los análisis de más de 10 mil llamadas telefónicas, así como de testimonios y declaraciones de líderes criminales realizados por la fiscalía especial del caso, lo que implicaría que el destino de los normalistas no fue el basurero de Cocula ni el río San Juan, como determinó la llamada “verdad histórica” expuesta por Jesús Murillo Karam.
Reconoció que 90 por ciento de las diligencias para la búsqueda de los jóvenes se han llevado a cabo en fosas, aunque enfatizó que mientras no exista evidencia científica de lo contrario la esperanza es hallarlos con vida.
Los padres de familia destacaron la voluntad política y la disposición de este gobierno, en particular del presidente López Obrador para conocer el paradero de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
También destacaron la decisión de traer de nueva cuenta al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independiente para retomar líneas de investigación que no fueron tomadas en cuenta en el gobierno de Enrique Peña.
Esta semana, al cumplirse cinco años y tres meses de la noche de Iguala, los padres realizaron una marcha de la glorieta de Peralvillo a la Basílica de Guadalupe, donde se ofició una misa en honor a los normalistas.
