Aunque el sindicato United Auto Workers (UAW) anunció que ha llegado a un acuerdo con el fabricante de automóviles General Motors (GM) para poner fin a una huelga en todas sus plantas de producción en Estados Unidos, hasta este momento se desconoce cuándo podría revertir los efectos negativos en sus plantas de México.
En el caso de Coahuila, en Ramos Arizpe, el secretario de Economía, Jaime Guerra Pérez, dijo sno tener información de los procesos que seguirá el corporativo en la región que mantiene en paro técnico a 450 trabajadores con los que se lograron acuerdos para evitar que dejen de recibir el 100% de su salario.
Por la mañana, el gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís informó que aún no se concretaba la reunión con los directivos para establecer apoyos a los trabajadores en tanto prevalecía la situación en Estado Unidos.
Sin embargo, se espera que no se tenga necesidad de un plan emergente y mucho menos de reajuste de personal que se planteaba canalizar a otras empresas de la zona.
En próximos días se espera respuesta oficial de General Motors, sobre sus trabajadores y la reanudación de sus actividades del motor ‘GEN V’ y la transmisión CVT que provocó dicho paro, así como las proveedoras que habían alcanzado un impacto en mil 500 trabajadores.