Que Valentín Aragón y Ernesto Alanís, son dos personajes muy cercanos al priista Esteban Villegas Villarreal y a quienes se les ha visto de manera reiterada en el Congreso del Estado de Durango. Entran y salen con frecuencia, platican. La lectura, es que ya se puede preparar el terreno para una candidatura a Gobernador. Y es que en la política los proyectos se gestan de años atrás. Villegas Villarreal aprovecha cada momento para posicionar temas que atañen a Durango, incluso para formar frentes con otros partidos para gestionar más recursos para el presupuesto de egresos de la federación. La estrategia comienza ya.
Que si en el Partido RevoIucionario (PRI), de Coahuila abundan los nombres de los prospectos a candidatos a una diputación, por Morena se anticipan fuertes agarrones entre los aspirantes, luego de las desastrosas asambleas distritales del domingo pasado. Entre toda esa caballada de aspirantes destacan los nombres del regidor José Ignacio Corona y Juan Carlos Parga, el primero, ex candidato a la Alcaldía, y el segundo, activista por el agua, quien ya le echó el ojo al Distrito X.
Que a Rolando Anaya no le sirvió ir a quejarse ante el otrora súper poderoso funcionario municipal, Antonio Loera, de que pretendían darlo de baja como director de Inspección y Verificación, pues aunque el director de Mantenimiento Urbano le aconsejó que no dejara la oficina, personal de la Contraloría le exigió ayer la entrega de la dependencia. En febrero pasado el alcalde Jorge Zermeño defendió a Anaya, pero finalmente, ante innumerables quejas de los ciudadanos, decidió darle las gracias y ayer quedó fuera de la nómina del Ayuntamiento. Para acabarla se está practicando una auditoría.
Que la coordinadora regional de Servicios Educativos, Flor Rentería, se ha ganado el título de “Lady Selfis”, pues es muy dada a las autofotos, sobre todo cuando anda de gira por tierras laguneras el gobernador Miguel Riquelme. Desde que el mandatario arriba al evento, hasta que se retira, Flor no se le despega y no le basta una foto a su lado sino que queda satisfecha hasta que logra media docena. Ya incluso despertó los celos de las líderes priistas de colonias populares, expertas en aparecerse en actos oficiales y perseguir funcionarios.
templete@milenio.com