Hace unas semanas concluyó el proceso de afiliación al PRD, con un registro de poco más de 1.5 millones de afiliados en el plano nacional y de cerca de 300 mil en lo estatal.
Podemos decir que fue un buen resultado, al considerar lo maltrecho que quedó el Sol Azteca después de la elección de 2018, donde se registró un desastroso resultado en todo el territorio nacional.
Recientemente se llevó a cabo su XVI Congreso Nacional del cuál contra todo pronóstico, sacaron una serie de importantes acuerdos.
Entre los resolutivos destaca la decisión de nombrar una comisión que recorrerá el país para informar las decisiones tomadas para el proceso de renovación y recabar las inquietudes de la militancia, así como la celebración del XVII Congreso Nacional y la renovación de los órganos de dirección y representación a más tardar en marzo de 2020.
Parece muy bueno para ser verdad... ¿En serio los tlatoanis del Sol Azteca renunciarán tan fácil a su proyecto Futuro 21 a pesar de que los números de la afiliación -por lo menos en el Edomex- no los favorezcan?
Pues parece que no tardaron mucho en dar señales de cuáles son sus intenciones.
Primero, la gira informativa por los 32 estados de la República aún no se realiza y no tiene fecha. Segundo, la ruta de posicionamiento de Futuro 21 continúa y el viernes realizarán un "conversatorio", nada más y y nada menos que en el Instituto Electoral del Estado de México, bajo el auspicio de la representación electoral del PRD, pero sin su participación.
Me atrevo a decir lo anterior, porque es un hecho que los principales liderazgos de ese partido no estarán presentes, por la simple y sencilla razón de que no los invitaron y en algunos casos la invitación llegó demasiado tarde.
Piensa mal y acertarás.
Tal pareciera que los sorprendentes acuerdos alcanzados en su pasado Congreso Nacional sólo tienen el propósito de entretener, mientras los dirigentes de facto, fieles a su estilo, afinan su futuro y agotan los tiempos para evitar inconformidades dentro de sus estructuras.
Por increíble que parezca, las señales que mandan con la forma en que están operando dicho evento, deja en claro que mientras no encuentren resistencias continuarán con su ruta, sin mayor consideración por su militancia y mucho menos por los resultados del reciente proceso de afiliación.
Porque priorizar el fortalecimiento del partido en el último trimestre del año, significa para ellos un suicidio colectivo, ya que de acuerdo con los números que existen, en el Edomex habría un nuevo grupo hegemónico en el que convergen dirigentes de las distintas regiones del estado.
Queda claro que por más esfuerzos que algunos hacen por "llevar la fiesta en paz", en el PRD mexiquense viene una lucha generacional por el control del partido.