La bala calibre 9 milímetros que mató a la estudiante Aideé Mendoza, del CCH Oriente, fue disparada desde el interior de la escuela, a una distancia no mayor de 40 metros del salón donde tomaba clases.
Autoridades del gobierno capitalino revelaron a MILENIO que con ello se descarta que se haya tratado de un asesinato premeditado y que el tiro proviniera de las instalaciones de la , que están a unos metros de este plantel de la UNAM.
Lo anterior coincide con los peritajes que realizaron por separado la Procuraduría General de Justicia Militar, la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJ) y expertos del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
Asimismo, se cuentan con datos para la elaboración del retrato hablado de la persona sospechosa de haber disparado. No obstante, el dictamen que elaboraron especialistas de la UNAM discrepa de estos resultados.
En un comunicado, la PGJ aseguró que el caso de la joven de 18 años "no está cerrado".
IRH
